De acuerdo con Banco Base, el petróleo cotizó con amplias fluctuaciones, debido a una serie de noticias y publicaciones que afectaron su precio.
Al inicio de la jornada, el petróleo fue presionado al alza ante la noticia de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados discutirán la posibilidad de extender sus recortes en la producción en 2019, debido a que algunos miembros se preocupan por la posibilidad de que los inventarios estén en acumulación.
De igual modo, el precio del petróleo comienza a reflejar la expectativa de que el crecimiento económico a nivel global se está desacelerando por las tensiones comerciales.
La institución financiera destacó que la desaceleración económica de China ya se ha comenzado a reflejar en la demanda por crudo, pues ésta se ha debilitado; ante ello, la OPEP y sus aliados pudieran buscar en 2019 recortar una vez más la producción petrolera, puesto que se espera que haya una menor demanda por el crudo.
Sin embargo, señaló que finalmente las presiones a la baja fueron causadas ante la publicación del reporte semanal de la Administración de Información Energética (EIA), el cual fue considerado pesimista por el mercado.
De acuerdo con la EIA, durante la semana que finalizó el 2 de noviembre, los inventarios de crudo de Estados Unidos mostraron un incremento de 5.78 millones de barriles, superando las expectativas del mercado.
Tal acumulación se debió principalmente a un incremento en la producción e importaciones del hidrocarburo en Estados Unidos, así como a una reducción en las exportaciones.
Ante tales hechos, la producción de petróleo mostró un fuerte incremento al alcanzar un nuevo máximo histórico de 11.6 millones de barriles diarios (mbd), mientras que las importaciones aumentaron en 166,000 barriles diarios a 7.54 mbd.