Frente al "éxito indiscutible" de la actividad de pasajeros, la del tráfico de mercancías por Eurotunnel "es un casi desastre", ya que sólo pasan por allí un millón de toneladas al año, cuando fue diseñado para 10 millones, subrayó Gounon en una entrevista publicada hoy por La Tribune.
La razón, a su juicio, es que los operadores históricos que han gestionado ese negocio "se han quedado en una lógica nacional" en Francia y en el Reino Unido.
Aunque señaló que por ahora no tiene previsto realizar nuevas compras, añadió que cuando el túnel de San Gotardo por los Alpes suizos entre en servicio, se podría establecer una línea de trenes de mercancías entre el Reino Unido e Italia, y entonces Eurotunnel podría contemplar operaciones en Suiza o Italia.
El presidente de Eurotunnel se mostró convencido de que en el transporte de pasajeros en el futuro habrá más de dos operadores bajo el Canal de la Mancha, e incluso en los trayectos entre París y Londres, donde por ahora Eurostar (un consorcio de las compañías francesa, británica y belga) tiene el monopolio.
A ese respecto, insistió en que el túnel se concibió para un tráfico muy superior al actual (en sus 25 años de servicio han transitado por él 265 millones de pasajeros) y que ganará cuota de mercado frente a los 'ferries' que conectan los puertos del noroeste de Francia con las del sur de Inglaterra.
Gounon repitió su posición en la polémica entre el fabricante francés Alstom, que ha recurrido ante los tribunales la atribución por Eurostar de una licitación de trenes al alemán Siemens.
Para Eurostar, los trenes de Siemens no plantean problemas, pese a que Alstom sostiene que las actuales reglas de seguridad en el túnel (en particular por el riesgo de incendio) no permiten que los convoyes tengan los motores repartidos a lo largo de todos los vagones.