El objetivo de la empresa es alcanzar velocidades superiores a los 1,200 kilómetros por hora, a través de cápsulas que viajen mientras levitan dentro de enormes cilindros de metal, al estilo de trenes urbanos muy sofisticados.
La idea original de Musk era conseguir construir vehículos con un área un poco mayor a los 2.5 metros cuadrados; que pudieran transportar, en menos de una hora, hasta 6 personas entre Londres y Edimburgo.