Briatore, que tiene como en anteriores Grandes Premios de Mónaco su barco, Force Blue, amarrado en el puerto de Monte-Carlo, tiene también como huésped, al presidente de la Administración de Fórmula Uno (FOM), Bernie Ecclestone, con el que ha departido dentro del paddock de Mónaco, donde también ha saludado a numerosos periodistas.
Sancionado a perpetuidad por el accidente del brasileño Nelson Piquet en el Gran Premio de Singapur de 2008 por el Consejo Mundial de la FIA, tras el recurso de Briatore a la justicia ordinaria y la llegada a presidencia de la FIA, el pasado mes de octubre, del francés Jean Todt, éste decidió rebajar la sanción hasta finales de 2011.