En declaraciones a la prensa, Medelci hizo hincapié en el papel desempeñado por el ejército argelino en la resolución de la crisis, y en concreto se refirió a las fuerzas especiales, que, ayer, sábado, ejecutaron la operación para liberar el complejo gasístico, donde el pasado miércoles una banda salafista se hizo fuerte con varios cientos de rehenes.
"La operación se ha desarrollado de un modo menos dramático gracias a la experiencia del ejército, que ha evitado que se desencadenara una tragedia" de mayores dimensiones, dijo el ministro.
Aparentemente, Medelci se refería al hecho de que, según se indicó en su momento, los terroristas estaban cargados de explosivos con las consecuencias que habría tenido que estallaran en una planta que produce más del 10 por ciento del total del gas argelino.
Según los datos provisionales publicados por el ministerio argelino del Interior, durante la operación de las fuerzas especiales murieron 23 rehenes, entre argelinos y extranjeros, así como 32 presuntos terroristas, mientras que fueron liberados 792 cautivos, 107 de ellos extranjeros.
Por su parte, la cadena privada argelina de televisión Ennahar informó hoy de que otros 25 cadáveres sin identificar fueron encontrados hoy en la planta de gas, si bien esta información no se ha confirmado oficialmente.
"Argelia ha vivido días difíciles y ha movilizado todas sus energías para superar esta prueba", afirmó el jefe de la diplomacia argelina.
Por su parte, el ministro argelino de Energía, Yusef Yusfi, dijo hoy que el ataque no ha causado daños de consideración en el complejo gasístico, situado a 1,300 kilómetros al sur de Argel, junto a la frontera con Libia, y explotado por la empresa estatal de Argelia Sonatrach, junto con la británica BP y la noruega Statoil.