Desde el 2020, un agresivo esfuerzo por reducir el CO2 se puso en marcha en Acuña, México, la planta de fabricación de Bendix Commercial Vehicle Systems LLC (Bendix). Ahora, después de importantes mejoras de eficiencia, incluyendo sistemas HVAC actualizados, fachadas modernizadas, sistemas de submedición y gestión de edificios y la instalación de paneles de energía solar, el complejo está en vías de reducir sus emisiones en cerca de 3,820 toneladas, lo que representa un ahorro de cerca de USD $805,000 al año en gastos de energía.
Bendix, en conjunto con su compañía matriz, Knorr-Bremse, ubicada en Múnich, Alemania, aprobaron los proyectos para la planta de Acuña, que fue inaugurada en 1988. Los proyectos apoyan un plan de acción climática más grande que busca cumplir los objetivos ambientales basados en ciencia de Knorr-Bremse, los cuales se definieron conforme a las estrategias de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el ODS 13 de Acción Climática.
Con todo lo anterior, los esfuerzos deben reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en línea con los objetivos de sustentabilidad. Un aspecto clave es el compromiso de Bendix y Knorr-Bremse de reducir las emisiones de CO2 de alcance 1 y 2 a mediados del 2030.
Bendix es el líder norteamericano en el diseño, desarrollo y fabricación de soluciones de seguridad activa, manejo de aire y sistemas de frenado para vehículos comerciales. Knorr-Bremse es el líder global del mercado de sistemas de frenado para vehículos comerciales y ferroviarios.
El agresivo programa de reducción de CO2 de la planta de Acuña abarca inversiones en múltiples edificios y en el creciente complejo, con un compromiso total de más de USD $3,800,000 para lograr un menor uso de energía, una mayor eficiencia energética mejorada y una mejor supervisión y control del consumo energético. Esto incluye un proyecto de USD $1 millón para instalar paneles solares en dos plantas de Bendix en Acuña. Se espera que los paneles solares suministren cerca del 10% de la energía necesaria para el complejo en crecimiento.
Los proyectos solares ahorrarán al complejo cerca de 2 gigavatios hora (GWh) de electricidad en el 2023, lo que representa casi la misma cantidad de energía necesaria para suministrar electricidad a 100 casas durante todo un año. En conjunto con los proyectos de eficiencia energética, se anticipa que los esfuerzos totales combinados a lo largo del periodo de tres años (2020-2022) reduzcan las emisiones de CO2 en 3,821 toneladas al año.
“Entre todas nuestras plantas en Norteamérica, la de Acuña destaca por sus agresivas medidas de sustentabilidad y reducción de CO2, las cuales están guiando el camino en toda nuestra organización”, dijo Maria Gutierrez, directora ejecutiva de iniciativas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) en Bendix. “Lo que empezó hace 15 años con un enfoque en la reducción de energía y costos ha avanzado, y hemos asumido un desafío mucho más grande. El equipo en Acuña está demostrando que, no obstante cuánto crezca la operación, seguimos comprometidos a lograr reducciones absolutas en nuestra huella de carbono en general —desvinculando de manera eficaz el crecimiento del impacto ambiental—”.
Gutierrez explicó que los proyectos de Acuña pretenden cumplir este nuevo desafío a través de tres maneras principales: implementar proyectos de eficiencia energética, reducir el consumo energéticos y aumentar el uso de energías limpias y renovables.
Incorporación de sistemas HVAC de alta eficiencia
La evaluación del consumo energético de las instalaciones mostró que sus sistemas HVAC, de aire comprimido y de iluminación eran algunos de los mayores consumidores de energía, lo que dio lugar a ciertas actualizaciones importantes. El primer esfuerzo consistió en instalar mejores unidades HVAC en la planta 1 de Acuña. Sus operaciones 24/7 ejercen una mayor presión en los sistemas HVAC y de aire comprimido, pero las auditorías revelaron que las actualizaciones podrían mejorar la gestión, la eficiencia y el control.
Durante la primera etapa en el 2020, la compañía invirtió en cuatro unidades HVAC de 50 toneladas de alta eficiencia instaladas en el tejado para reemplazar 13 unidades interiores de 15 años de antigüedad instaladas en el techo del área de maquinaria. La inversión de USD $438,000 también incluyó la instalación de tubería para mejorar la distribución de aire frío.
El nuevo equipo es 50% más eficiente que el antiguo sistema y se espera que reduzca el consumo energético en unos 966,000 kilovatios hora (kWh) al año, lo que generará ahorros de costos anuales de USD $72,500 y un rendimiento a seis años. La actualización también creará un entorno laboral más cómodo y contribuirá a la seguridad de la planta, ya que eliminará la necesidad de contar con plataformas de tijera para dar mantenimiento a los equipos HVAC.
“Las nuevas unidades son mucho más eficientes que nuestro antiguo sistema y nos han permitido adquirir unidades con una capacidad 25% menor”, dijo David Rountree, subgerente de planta en Bendix Acuña y miembro del equipo del Programa de Reducción de CO2. “Por lo tanto, estas unidades no solo serán más eficientes, sino que también necesitaremos una menor cantidad de ellas. Además, pensamos que las personas también estarán mucho más cómodas”.
Los beneficios adicionales del sistema incluyen su capacidad de integrarse en el sistema de gestión del edificio, así como de ayudar a eliminar paulatinamente algunos de los refrigerantes menos favorables para el medio ambiente que se utilizaban en los equipos más antiguos.
Actualizaciones a las fachadas e instalaciones de los edificios
En un proyecto similar de varios edificios diseñado para reducir el consumo energético e incrementar la eficiencia, se realizaron mejoras a las fachadas de los edificios en las plantas 1, 2 y 3 de Acuña. Los accesos y puertas de las plantas —que se utilizan para el acceso de montacargas, recepción, acceso a las áreas de desechos y entradas de personal— se remodelaron con puertas automáticas de alta velocidad fabricadas a la medida. Las entradas también se equiparon con cortinas de aire que expulsan corrientes de aire delgadas para separar los espacios internos y externos. Las cortinas de aire ayudan a generar ahorros energéticos, ya que mantienen el aire controlado por temperatura dentro del edificio, además de impedir la entrada de aire, insectos, polvo y humedad del exterior. Se espera que las mejoras, cuyo costo ascendió a cerca de USD $165,000, generen ahorros de costos energéticos de unos USD $50,000 al año y reduzcan el uso de energía en unos 800,000 kWh.
Asimismo, se instalaron sistemas de gestión de edificios en las plantas 1, 2 y 3, una inversión de USD $121,000 que se espera reduzca el consumo energético en 140,000 kWh al año. Los sistemas permiten centralizar la integración, gestión y control de la iluminación, los compresores y los sistemas HVAC, lo que aumentará aún más la eficiencia en general de los sistema conectados y disminuirá el consumo energético.
Producción y adquisición de energías limpias
Además de los esfuerzos enfocados en la eficiencia y la conservación, el complejo de Acuña también está explorando otra estrategia de sustentabilidad mediante la generación de su propia energía renovable. A finales del 2021, Knorr-Bremse aprobó los planes de instalar dos matrices solares, cada una en las plantas 1 y 2 de Acuña. La inversión de USD $1 millón, que inició a finales del 2022, dio como resultado la instalación de dos sistemas fotovoltaicos capaces de generar 2 gigavatios hora (GWh) de electricidad renovable anualmente. Se espera que cada sistema suministre cerca del 10% de las necesidades energéticas de cada planta. Juntas, las instalaciones ayudarán al complejo a evitar 850 toneladas de emisiones de CO2 —una reducción anual de aproximadamente el 10% respecto al 2021— y a ahorrar unos USD $170,000 en costos de energía al año.
Las matrices solares también representan los primeros sistemas de este tipo instalados por una organización manufacturera en la región de Acuña, y la segunda en su tipo por Bendix Norteamérica. La compañía concluyó su primera matriz solar, una instalación de 1.168 megavatios, en el campus de Huntington, Indiana, en agosto de 2021.
Otra inversión más en energía renovable se refleja en el nuevo contrato de energía de Acuña que comenzó en el 2022. Como parte del nuevo contrato, el proveedor garantiza que hasta el 50% de la electricidad suministrada se producirá a partir de fuentes renovables.
“Con nuestra inversión en energía solar, un nuevo contrato que utilizará el 50% de energía renovable y nuestras diversas mejoras a los edificios, Bendix Acuña está contribuyendo a los ambiciosos objetivos climáticos de la organización”, dijo Gutierrez. “Nuestra planta en Acuña está creciendo, pero gracias los cambios que estamos llevando a cabo, lo haremos sin aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero”.