El circuito de Eifel es el único que ha estado presente en todas las temporadas del DTM desde su nacimiento allá por 1984. De hecho, hasta 1993, las pruebas se disputaban en el legendario y exigente Nordschleife, el antiguo circuito considerado el más exigente de todos los tiempos. Para 2018, Nürburgring acogerá la octava prueba del calendario, concretamente la que incluye las carreras 15 y 16 de la temporada. Tras dos pruebas consecutivas situado en los puntos, el piloto de Audi y embajador de Schaeffler Mike Rockenfeller acude a la cita con gran confianza y en buen estado de forma. Para su escudería, el Team Phoenix Racing, esta es además una carrera en casa ya que su cuartel general se encuentra en las inmediaciones del circuito.
Larga tradición en el DTM
Desde los comienzos del DTM, Schaeffler y sus marcas han prestado su apoyo a pilotos y equipos con tecnología y conocimientos técnicos. Además desde 2011, el grupo presta su nombre al equipo Schaeffler Audi, con el que ha celebrado numerosos éxitos, incluyendo dos victorias absolutas en el campeonato. Esta categoría se caracteriza por los motores exclusivamente de combustión interna, un concepto aun vigente y en el que Schaeffler hace una importante contribución en materia de eficiencia y reducción de emisiones para la movilidad del mañana.