El camino hacia la creación de un mundo sustentable ya no incumbe únicamente a los gobiernos y las organizaciones internacionales, ahora la atención se ha enfocado en el sector privado, toda vez que las empresas son responsables de alrededor del 70% de las emisiones globales1.
Las compañías del sector químico no son la excepción, y han respondido al reto de la economía circular. Dicha industria está trabajando en adoptar más materias primas alternativas, tales como la biomasa (reemplazo de materias primas como el petróleo), los materiales reciclados o el hidrógeno verde, acompañado del uso de fuentes de energía limpia como la eólica.
Estos esfuerzos suman mucho valor en mercados como el mexicano que, a pesar de contar con una creciente concientización pública sobre los problemas ambientales, enfrenta una serie de desafíos ambientales muy serios y sigue siendo el segundo país con mayor emisión de gases de efecto invernadero en América Latina.
Frente a esta situación, Covestro, dedicada la producción de polímeros de alto rendimiento y con una Planta ubicada en Ecatepec de Morelos, destaca por sus prácticas medioambientales y mantiene su posición entre las empresas líderes en este segmento. Recientemente, la compañía fue reconocida por la Carbon Disclosure Project (DCP) por sus labores de protección climática durante 2022 y su enfoque en la economía circular.
La DCP es una organización sin fines de lucro considerada una de las más prestigiosas del mundo en cuanto a información y gestión medioambiental por parte de las empresas. Se divide en 10 categorías, de las cuales Covestro sacó la máxima calificación posible en cuanto a “Estrategia empresarial, planificación financiera y análisis de escenarios”, “Emisiones de alcance 1 y 2 (incl. verificación)”, “Gobierno corporativo” y “Difusión de oportunidades.”
Durante 2022, Covestro consiguió avanzar en términos de economía circular, centrando su estrategia en la neutralidad climática y aplicando soluciones sustentables. Ejemplo de ello es apostar por la biotecnología blanca (diseño y optimización de procesos industriales), y este año ha inaugurado un nuevo laboratorio de investigación cuyo objetivo es promover procesos de reciclaje basados en enzimas y microorganismos.
Por último, la compañía está ampliando constantemente su cartera de productos con un contenido mínimo del 25% de materias primas alternativas bajo la nueva etiqueta “CQ” (Inteligencia Circular) para facilitar el reconocimiento del grado de sostenibilidad de un producto en el futuro.