"Como le he dicho en ocasiones anteriores, no hay nada en el capítulo automotriz que implique un cambio en salarios, no hay ningún elemento en el propio acuerdo que hable de los salarios que se deban de pagar en nuestro país; me parece que ha sido una lectura que no es la adecuada", dijo Solís.
El directivo explicó que "en el cumplimiento de la regla de origen, hay un apartado que se llama valor de Contenido laboral, que lo único que especifica es que un porcentaje del vehículo tiene que ser producido en lugares donde se pagan más de 16 dólares la hora, y luego vienen créditos que se pueden otorgar para bajar ese porcentaje, por cierto 45 por ciento en el caso de las pick ups, pero en ninguna parte se especifica alguna obligación de México o de cualquier país, de pagar cierto nivel de salarios, no hay tal".
Con respecto a la afectación para las marcas que producen en México con el nuevo acuerdo, el presidente de la AMIA reconoció que "la industria tiene un reto grande, la industria tiene un reto importante y que las empresas seguramente tendrán que hacer un esfuerzo para poder cumplir una regla de origen que, no solamente es compleja, sino además, es más estricta; pero ese reto lo tendrán que cumplir a nivel de cada una de las marcas en nuestro país".