El gobierno regional seguirá así los pasos de España, que en marzo decidió rebajar el límite de velocidad de 120 a 110 km/h, ante el encarecimiento de la gasolina por los conflictos del norte de África.
El portavoz del departamento de Transporte de Northern Cape, Matshube Mfoloe, dijo que su departamento está "explorando vías legales" para aminorar la marcha de sus vehículos, excluyendo los servicios de emergencia y los coches de los altos funcionarios.
La medida, añadió Mfoloe, ayudará también a reducir el número de accidentes protagonizados por vehículos gubernamentales y los gastos en multas de tráfico.
El portavoz del departamento de Transportes informó de que solo en 2010, más de 330 vehículos del gobierno regional sufrieron algún siniestro.