Daniel Casarín, product manager en Kärcher México, recomienda hacerlo paso a paso. Antes de usar el potente chorro de agua, se aplica primero una solución de detergente a baja presión de abajo hacia arriba. Así es más fácil ver las áreas que se deben limpiar mejor y de esta manera también se alarga el tiempo de actuación del detergente. Casi todas las limpiadoras de alta presión pueden aspirar detergente o poseen un depósito que se llena antes de ponerse en marcha.
Durante el tiempo de actuación, el automóvil no puede estar directamente expuesto al sol, porque la solución de detergente se secaría demasiado rápido. Después de cinco minutos se rocía el automóvil con alta presión. También se aplica de abajo arriba para conseguir un resultado óptimo. “Lo ideal sería que se hiciera con un chorro plano y a una distancia de diez a treinta centímetros”, aclara Daniel. Si se aplica de esta manera, no habrá que preocuparse por daños en los neumáticos, o cualquier otra parte de nuestro vehículo que se pueda dañar.
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Quien disponga de un cepillo de lavado puede conectarlo a la limpiadora de alta presión. Pero antes se debe haber completado el lavado del coche con alta presión, para que las piedras y otro tipo de suciedad no provoquen daño en la pintura.
En Kärcher México se puede encontrar el accesorio adecuado, de acuerdo al tipo de limpieza que se desea obtener, desde cepillo de lavado giratorio o suave, hasta el champú para automóviles.