Este financiamiento corresponde al proyecto “Mitigación al cambio climático mediante el fomento del uso de bicicletas públicas en las ciudades de Santiago (Chile) y Ciudad de México (México)”. El recurso fue aprobado por la Comisión de Cooperación del Fondo México-Chile y se invertirá en fortalecer el fomento del uso de este vehículo no motorizado.
Dicha estrategia se realizará con base en un diagnóstico entre ambas ciudades el cual inicia con visitas técnicas que contribuirán al conocimiento de las circunstancias de cada una de las plazas y de sus buenas prácticas en materia de movilidad ciclista. Los primeros en realizar la visita de diagnóstico fueron los representantes de Santiago de Chile, Valeria López Olivares, jefa de Departamento de Espacios Públicos, y Andrés Díaz, ingeniero de proyecto, ambos del gobierno regional metropolitano de Santiago.
Durante el recorrido se visitó el Centro de Operaciones de Ecobici, el Biciestacionamiento Masivo (BEM) Pantitlán, la construcción del Biciestacionamiento Masivo (BEM) La Raza, el Proyecto Calle Completa en la Avenida Eduardo Molina, la red de ciclovías y el proyecto Mi Calle 20 de Noviembre, entre otros.
Por otra parte, se llevó a cabo una mesa de intercambio de experiencias y buenas prácticas de movilidad ciclista en la que participaron integrantes de la Dirección de Cultura, Diseño e Infraestructura Ciclista de la Sedema, de la Semovi, del Laboratorio para la Ciudad, y el Consejero de Movilidad Sustentable de la Embajada de Francia, Oliver Schneider; así como, del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés), Mi Bici Pública, de Guadalajara, Jalisco, y de la sociedad civil como Bicitekas, la Bicired y la Liga Peatonal.
En dicha mesa se destacó la implementación de infraestructura ciclista en las ciudades de América Latina y los retos que representa para los gobiernos y la sociedad civil; se reconocieron los esfuerzos en materia de capacitación y fomento del uso de la bicicleta, además de que se compartieron las experiencias de gobierno respecto a la inversión que se destina en materia de infraestructura ciclista para contribuir con un reordenamiento de los espacios públicos y hacerlos más incluyentes.
A manera de ejemplo, en la ciudad de México se destacó que antes de finalizar 2015 se crecerá la ya existente red de ciclovías y se tendrá un nuevo Biciestacionamiento Masivo en el Centro de Transferencia Modal (Cetram) La Raza.
El Fondo Conjunto de Cooperación Chile–México es un instrumento de cooperación internacional y forma parte del Acuerdo de Asociación Estratégica suscrito por los Estados Unidos Mexicanos y la República de Chile el 26 de enero de 2006. Permite financiar la ejecución de programas, proyectos y/o acciones bilaterales y trilaterales de cooperación para el desarrollo.
La coordinación e implementación del Fondo está a cargo de la Comisión de Cooperación, integrada por los titulares de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, AMEXCID, de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México y la Agencia de Cooperación Internacional de Chile, AGCI.