El mayor fabricante de maquinaria pesada del mundo, con sede en Peoria (Illinois), indicó en un comunicado de prensa que su ganancia por acción durante el último trimestre fue de 36 centavos, frente a los 1.08 logrados en el mismo periodo de 2008.
Sobre el conjunto de 2009, su ganancia por acción fue de 1.43 dólares, frente a los 5.66 dólares por título del anterior ejercicio fiscal, y algo inferiores a lo esperado por los analistas.
"Vemos señales de mejoras económicas, particularmente en China y en muchos países en desarrollo. También hay mejorías en Norteamérica, Europa y Japón, pero esas economías siguen siendo débiles y no han repuntado tan rápido como las de los países en desarrollo", señaló el presidente y consejero delegado de la firma, Jim Owens.
Según sus pronósticos, Caterpillar espera que la economía mundial crezca el 3 por ciento en 2010.
Agregó que también ya hay mejoras en las ventas de piezas para servicios posventa, lo que se considera como uno de los indicadores tempranos sobre la recuperación de la demanda en el sector de la maquinaria y la ingeniería.
En 2009 esta firma tuvo unos beneficios de 895 millones de dólares, que supone el 75 por ciento menos que los registrados en 2008, cuando se apuntó 3 mil 557 millones de dólares, lo que atribuyó a una significativa bajada de su volumen de ventas.
Para este año Owens señaló que la firma espera que "sus ventas e ingresos sean del 10 al 25 por ciento superiores a los de 2009", además de repartir un dividendo por acción de 2.5 dólares.
"Nos sentimos animados por las señales de que la demanda mejora", señaló Owens, que indicó que las ventas y los pedidos de los concesionarios aumentan, y los inventarios bajan, con mayores ventas en piezas y recambios.
El responsable de la empresa estadounidense indicó que están aumentando la producción de sus fábricas, al igual que la de sus distribuidores, además de señalar que ya han vuelto a contratar a 500 trabajadores despedidos el pasado año.
En 2009, esta empresa, cuyos resultados se toman a menudo como una referencia para estudiar la evolución de la economía en Estados Unidos, eliminó 25 mil puestos de trabajo debido a la caída de la demanda de sus productos.
Caterpillar señaló que durante 2009 sus ventas en Norteamérica bajaron el 45 por ciento, lo que atribuyó a que el sector de la construcción ha atravesado en el último año por el peor momento de su historia, pues además de que se construyó el 39 por ciento menos que en 2008, los precios bajaron en torno al 15 por ciento.
En Europa y Oriente Medio, sus ventas bajaron el 55 por ciento, en la zona de Asia y Pacífico, el 21 por ciento, y en la región latinoamericana, el 28 por ciento, siendo México uno de los países en que más bajos niveles de venta registró la empresa debido a su cercanía con Estados Unidos.
En ese país, señaló Caterpillar, sus cercanos lazos a la economía estadounidense y el lento ritmo en la reducción de sus tasas de interés causaron un declive de la producción industrial del 8 y del 7 por ciento en la construcción.
También registraron importantes descensos en las ventas de sus productos los mercados de Brasil y Chile.