Una de las afectadas de la Zona Escolar Oriente, Rosalba López, expresó que nunca se habló de forma real en el proyecto, de las afectaciones a la comunidad: “La gente finca su patrimonio con mucho sacrificio para que nada más vengan y le digan que tiene tres meses para desocupar”.
La vecina afectada expresó que para guardar las formas se realizó una votación a mano alzada el pasado miércoles, con gente afiliada al partido Morena, que no era de la colonia, para generar el supuesto apoyo para la construcción.
Juan Téllez, otro de los vecinos de Cuautepec que se manifiesta en contra del proyecto Cablebús, dio a conocer el amaño como se realizó la votación, con una convocatoria firmada el domingo 8 pero impulsada públicamente sólo por whatsapp el pasado martes 10 por la tarde, para la votación que se realizaría al día siguiente, miércoles 11, porque el jueves 12 sería la colocación de la primera piedra.
La presunta consulta se realizó en un día hábil, cuando la mayoría de la gente se encuentra en el trabajo, pero aun así, dijo Téllez, “nosotros éramos más que los que llevaron de Morena y del comisariado ejidal que se prestó a la trama; eso provocó que la representante del Consejo del Pueblo de Cuautepec, Jade Peña, en un momento dijera que no había condiciones para llevar a efecto la votación y se salió del gimnasio del deportivo Carmen Serdán, pero no dijo que habría un receso”.
Entonces vino la trama porque luego de que los simpatizantes de Morena ligados a la alcaldía llegaron a reventar la reunión, desmontaron el aparato de sonido, levantaron la mesa de presídium y dejaron el lugar sin nada. Jade Peña y los representantes del comisariado, Lorenzo Emilio Fuentes Parada, Ulises Flores Carrillo y Alicia Tinoco, entre otros, se fueron al espacio de las oficinas de la territorial 9 de la GAM, a unos pasos de allí donde se reunieron con Larisa Ortiz Quintero, Secretaria de Pueblos Indígenas del Gobierno de la Ciudad de México.
Tras una hora y media, cuando ya la mayoría de la gente que está en contra de la construcción del Cablebús se había ido a sus labores, como son las madres por sus hijos a la escuela, relató Juan Téllez, regresó la representante del Consejo del Pueblo y a mano alzada pidió que la gente sacara su credencial de elector, y así llevó a cabo la votación, sin verificar que fueran personas del pueblo de Cuautepec quienes votaron, como en efecto ocurrió.
Rosalba López dijo que no dejarán pasar a sus casas a la gente que está realizando las mediciones para la construcción, como ya ocurrió ayer mismo, y anunció que iniciarán una resistencia civil pacífica para evitar la realización de la obra porque, como decían en las mantas, Cuautepec tiene mayores necesidades que el transporte, como son la inseguridad, obras de drenaje, alcantarillado y agua, mientras el sistema de transporte se puede resolver de otra forma, como con la realización de obras de infraestructura pero no el cablebús.
Uno de los lugares de resistencia son los campos del deportivo Revolución que, expresó Rosalba López, son un centro de concentración para el arropo de la comunidad, como deporte, punto de reunión, etc.
En el Parque Revolución los vecinos tenían mantas que decían entre otras cosas: “El Cuautepec cada vez más muertos, resuelvan al inseguridad y después quítenle sus casas a sus habitantes”; “Y nosotros pensamos que de verdad se acabaría la corrupción”; “A cuántos tienes que afectar para beneficiar a unos cuantos”; Familias al desamparo; Gobierno CDMX quiere dejar a niños sin hogar”; gobierno, estás para ayudar, no para perjudicar”.