Sin embargo, de acuerdo con una encuesta de la casa de investigación y opinión pública, Defoe, sobre el uso de transporte público, un 36 por ciento de los usuarios no utilizan cubrebocas.
Esto toma relevancia si se considera que tan sólo en junio, de acuerdo con las Estadísticas de Transporte Urbano de Pasajeros del INEGI, el uso de transporte público en las ciudades de México, Guadalajara, Monterrey y Pachuca, fue 2.8 por ciento mayor respecto a mayo y 58.6 por ciento más en comparación con junio de 2020.
Al respecto de la Ciudad de México, el principal medio de transporte público fue el Metro, el cual prestó servicio a 63.4 millones de usuarios en ese periodo.
Siguiendo con la encuesta de Defoe, entre las acciones que realizan los usuarios en el transporte para prevenir el coronavirus están: la aplicación de gel antibacterial antes y después de bajar del transporte (48 por ciento); no hablar durante el viaje (33 por ciento), no ingerir alimentos (30 por ciento) y evitar subirse cuando ya hay muchas personas dentro (28 por ciento).
Sólo 1 de cada 10 se cerciora de que la unidad cumpla con los requisitos sanitarios (ventanas abiertas, conductor con cubrebocas, etc.), y de hecho, las personas con escolaridad media o superior son las que revisan que la unidad cumpla con las condiciones adecuadas.
En cuanto a las problemáticas más fuertes para los usuarios de los sistemas de transporte público se ubica en primer lugar la inseguridad al viajar, ya que 5 de cada 10 personas coonsideran el robo como la mayor vulnerabilidad. Después de ello están “los choferes sin preparación” con 39 por ciento, las malas condiciones de las unidades y el exceso de velocidad con 38 por ciento, y que no se respetan los protocolos de higiene contra Covid-19, con 30 por ciento.