Como parte de esa nueva norma, se pedirá a los conductores que proporcionen una fotografía de ellos mismos, con la que verifiquen que están cumpliendo las reglas antes de poder empezar a trabajar.
Tanto pasajeros como conductores podrán cancelar su viaje sin ningún tipo de penalización financiera en el caso de que la otra parte no lleva la mascarilla.
Esa nueva política de la empresa va en línea con la decisión del gobierno británico de que el uso de mascarillas sea obligatorio para los usuarios del transporte público en Inglaterra desde el próximo lunes.
Además, los conductores de Uber deberán confirmar que han adoptado medidas de seguridad adicionales, como las desinfecciones regulares de sus vehículos y que se lavan las manos de forma regular.
"Durante meses hemos urgido a los ciudadanos a que se queden en casa, por su seguridad y la de los conductores que realizan viajes esenciales", apuntó hoy Jamie Heywood, el gerente regional de la compañía de taxis para el norte y el este de Europa.
Heywood agregó que ahora que los comercios comienzan a reabrirse y los ciudadanos vuelven a moverse de nuevo, Uber adoptará medidas "que contribuyan a que todo el mundo esté seguro cada vez que utilicen" sus servicios.
"Hemos introducido medidas a fin de asegurar que cada conductor pueda acceder al equipo de protección personal que necesitan de forma gratuita para ayudar a que estén seguros cuando conducen con Uber y desde el lunes, requeriremos que todo el mundo que utiliza la aplicación de Uber en el Reino Unido lleve una mascarilla", explicó.