E.on informó hoy de que la facturación se mantuvo en el mismo periodo en 35,881 millones de euros, frente a los 35,731 millones de un año antes.
Las ventas de gas subieron en los tres primeros meses del año un 5 por ciento, mientras que las de electricidad bajaron un 8 por ciento.
La ganancia operativa se redujo entre enero y marzo un 3 por ciento, hasta 2,735 millones de euros.
La compañía alemana explicó que las desinversiones y los márgenes de beneficio en la generación de energía fósil más bajos disminuyeron la ganancia.
La reducción de costes y el aumento de la ganancia en renovables por el aumento de la capacidad instalada de generación tuvieron un efecto positivo en el resultado.
E.on tenía a finales de marzo una deuda neta de 31,600 millones de euros, 4,300 millones de euros menos que a finales de 2012.
La compañía un beneficio neto entre 2,200 y 2,600 millones de euros para el conjunto de 2013.