Además de las disposiciones adoptadas como lavarse las manos frecuentemente, practicar el estornudo de etiqueta, no tocarse ojos, nariz o boca, a todo el personal se le proporciona, de manera constante, guantes de látex, gel antibacterial, cubrebocas y cloro (hipoclorito de sodio).
Las 133 plazas de cobro que administra Capufe, se limpian y desinfectan de forma permanente.
Adicionalmente, al personal médico se le ha entregado equipo de protección, como trajes especiales y goggles.
Estas prácticas se llevan a cabo con el propósito de proteger la salud, tanto de usuarios como trabajadores y poder proporcionar un servicio fundamental para el traslado de personas y mercancías a lo largo del país.
Todos los días se contacta con los coordinadores regionales, quienes llevan un monitoreo y control preciso del personal que labora en el interior del país, y ante cualquier caso sospechoso, se procede a tomar las medidas pertinentes.
A la fecha, de un poco más de siete mil 500 trabajadores, se han detectado cuatro casos de contagio por el COVID-19; todos se encuentran fuera de peligro.
Por otra parte, el personal con enfermedades crónicas, adultos mayores y mujeres embarazadas, durante la Jornada de Sana Distancia, no acuden a sus centros de trabajo; la mayoría realiza sus labores desde casa.
A pesar de las medidas implementadas, Capufe recomienda a los usuarios efectuar el pago de peaje mediante TAG electrónico, para evitar el contacto humano.