Al respecto, Octavio Rangel, director general de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero, dio a conocer que, de acuerdo a la última información disponible, en enero pasado quedó confirmada la participación creciente de las importaciones europeas, ya que una muestra de los principales productos planos y largos registró una importación de 56,000 toneladas, cifra 23.2 por ciento superior a las 45,400 toneladas del mismo mes de 2011.
El directivo de la Canacero agregó que, de mantenerse la tendencia observada en enero de este año, la importación de esa muestra de productos de Europa podría alcanzar 674 mil toneladas en 2012, cifra 41 por ciento superior a la registrada en 2011.
Las estadísticas del sector revelan que el volumen de importación total de productos siderúrgicos europeos en 2011, de 673,000 toneladas, significó un aumento de 3 por ciento con relación a las 654,000 toneladas de 2010.
Si bien al cierre del año pasado las importaciones de acero provenientes de Europa registraron un aumento moderado con relación a 2010, trimestre a trimestre la situación se volvió preocupante, pues en los últimos tres meses de 2011 el repunte fue de casi 20 por ciento y en enero de este año alcanzó 23.2 por ciento.
La tendencia al alza en las importaciones originarias de Europa al final de 2011 es congruente con su deterioro económico. El PIB europeo se contrajo 1.3 por ciento en el cuarto trimestre de ese año, ante lo cual las empresas siderúrgicas buscaron colocar su producto en mercados externos, situación que puede agravarse en los próximos meses.
Octavio Rangel planteó que la economía de Europa se deteriora de forma progresiva, pues de acuerdo al Fondo Monetario Internacional esa zona tendrá una contracción de 0.5 por ciento de su Producto Interno Bruto durante este año, por lo cual es importante el riesgo de un crecimiento significativo de las importaciones de acero del viejo continente.
“La industria siderúrgica mexicana está preocupada por las importaciones crecientes de Europa, ya que la experiencia indica que cuando un país atraviesa por una recesión económica, el acero es uno de los primeros productos a exportar por su alto comercio mundial”, señaló.
Precisó que, ante esta situación, la Canacero mantendrá un seguimiento mensual de las importaciones provenientes de los países europeos, sobre todo para identificar posibles operaciones en condiciones de dumping.