Los estados que presentaron mayor aumento en cuanto al índice de mortalidad en los últimos tres años fueron Zacatecas con más del 28 por ciento, seguido de Tabasco y Sinaloa con un 27 y 24 por ciento respectivamente, según el Observatorio Nacional de Lesiones junto con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y el Consejo Nacional de Población (Conapo). Siguiendo con el mismo estudio, y contrastando los datos anteriores, los estados con menor mortalidad fueron Veracruz de Ignacio de la Llave, 6.4 por ciento; Ciudad de México, 7.5 por ciento y Estado de México con 8.7 por ciento.
No obstante, y a pesar de estas impactantes estadísticas, desde el 2012 la tendencia a sufrir un accidente vial ha disminuido y cada vez más personas se apoyan en un comparador de seguros como Rastreator.mx (www.rastreator.mx) para contratar una póliza que les cubra en caso de accidente. Por su lado, los peatones, ocupantes de auto, motociclistas y ciclistas son la parte de la población más vulnerable a sufrir un incidente ya que cuentan con mayor índice de fallecimientos por accidentes y atropellos vehiculares.
En paralelo, el alcohol sigue estando presente de manera alarmante en los accidentes viales. El reporte indica que en el mismo lapso, el 7.7 por ciento de los siniestros vehiculares el onductor responsable tenía aliento alcohólico y de las 1,831 autopsias realizadas, cerca del 11 por ciento dio positivo al alcohol. Asimismo, casi el 18 por ciento de los individuos que tuvieron que ser llevados a urgencias a un hospital por un incidente automovilístico, también habían ingerido bebidas embriagantes durante las seis horas previas al suceso.
Es una triste realidad, pero los accidentes de tránsito seguirán ocurriendo. Por ello se debe reforzar la prevención y mejorar la cultura relacionada con el manejo y la seguridad vial, para que los conductores y peatones sean cada vez más conscientes de los peligros a los que están expuestos; no solo al ingerir bebidas alcohólicas, sino por hablar con el celular o no llevar el cinturón de seguridad abrochado.
Aunque muchos de estos accidentes son inesperados para los conductores o podrían evitarse, hay una situación clara y es la importancia de contar con un seguro de auto que podría ayudar a solventar los gastos que se deriven de los posibles siniestros. Como por ejemplo, la atención hospitalaria, reparación del coche, daños a peatones, entre otros. Y es que el 50 por ciento de los hospitalizados por choque, adquieren una deuda donde el costo puede ser incluso más del 100% de su ingreso, según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).