1. Conoce tu vehículo
Antes de salir al camino, asegúrate de conocer a fondo tu automóvil. Familiarízate con los controles, luces y sistemas de seguridad para garantizar un manejo seguro.
2. Cumple con las leyes de tránsito
Respeta las normas de tráfico y límites de velocidad, como tomar las máximas precauciones cuando haya peatones sobre el arroyo vehicular, compartir los carriles de circulación de manera responsable, circular en el sentido que indique la vía y rebasar solo por el lado izquierdo. En el caso de vehículos motorizados que adelanten a ciclistas o motociclistas deben otorgar al menos la distancia de 1.50 metros de separación lateral y más[1]. No solo te proteges a ti mismo, también contribuyes a la seguridad de todos.
3. Evita las distracciones
En México, 93.5% de los conductores considera que es peligroso usar el celular mientras se conduce, pero el 70.6% lo hace de todas formas, ya sea en menor o mayor grado[2]. Nuestra recomendación es nunca usar el celular al conducir. Las distracciones pueden ocasionar accidentes graves, que son prevenibles: si necesitas hacer una llamada o enviar un mensaje, estaciona en un lugar seguro o bien pídele a tu copiloto que atienda por ti.
4. Mantén una distancia segura
Sigue la regla de los "tres segundos" detrás del vehículo que te precede, esto te dará tiempo suficiente para reaccionar en caso de emergencia. Existe una revisión de los tiempos de reacción y el 90% de las situaciones habituales muestra un promedio de 2.5 segundos. Para situaciones específicas, como realizar una maniobra de parada en carretera en una zona rural, son tres segundos y para una maniobra de parada en carretera en una zona urbana son nueve segundos[3].
5. Respeta a los peatones y ciclistas
Cede siempre el paso a peatones en pasos de cebra y respeta a los ciclistas. Ten en cuenta que los peatones, ciclistas y motociclistas son los usuarios más vulnerables, ya que las condiciones de sus traslados implican que, en caso de verse involucrados en un hecho de tránsito, son más propensos a sufrir lesiones graves. Cada día, quienes van a pie y los usuarios de bici suman 19, 824, 073 viajes en la Ciudad de México[4].
Otras recomendaciones que debemos tener en cuenta son: no conducir bajo los efectos del alcohol, abrocharse el cinturón de seguridad antes de iniciar el viaje (esto incluye a tus pasajeros), adaptar tu velocidad y estilo de conducción a las condiciones climáticas y realizar un mantenimiento regular del vehículo.
Y sumando a todos los aspectos técnicos, sé respetuoso y empático hacia los otros conductores, incluso si cometen errores, esto puede prevenir situaciones de enojo al volante. Ser un buen conductor implica cumplir con las reglas de tráfico y asumir la responsabilidad de la seguridad vial.
Únete al movimiento Puede Esperar: enfócate en el camino, por tu bienestar y el de tus seres queridos. Firma y comparte la promesa de no usar el celular al manejar dando clic aquí. Actualmente, más de 54 mil personas han firmado la promesa de Puede Esperar para ayudar a disminuir las estadísticas de accidentes de tránsito. |
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