ThyssenKrupp informó hoy de que va a reducir uno de cada cinco empleos administrativos en todo el mundo, de ellos 1,500 en Alemania.
La compañía alemana, que facturó en su primer semestre fiscal 19,952 millones de euros, un 14 por ciento menos que un año antes, garantizó que no se van a producir despidos forzosos.
ThyssenKruup ya había anunciado este año que va a recortar 2,000 empleos en su división de acero en Europa.
Las pérdidas en las fábricas de acero en Estados Unidos y Brasil de 683 millones de euros generaron unos números rojos operativos en el primer semestre 2012-2013 de 496 millones de euros, un 15 por ciento menos que un año antes.
La facturación se redujo en el mismo periodo un 14 por ciento, hasta 19,952 millones de euros.
El proceso de venta de las fábricas de acero en Estados Unidos y Brasil sigue según el plan previsto, dijo el consejero delegado de ThyssenKrupp, Heinrich Hiesinger, en un comunicado.
La compañía alemana añadió que el volumen de entrada de pedidos se redujo hasta 19,318 millones de euros, un 7 por ciento menos que en el primer semestre del ejercicio 2012-2013.