La planta fabricará componentes para un total 200,000 vehículos, aunque inicialmente funcionará al 25 por ciento de su capacidad y no lo hará en su totalidad hasta 2012.
Aunque la compañía no reveló cuánto dinero ha destinado a la construcción de la fábrica, la inversión total de Magna en Rusia asciende a 250 millones de euros.
En la planta de Kaluga, a unos 180 kilómetros al suroeste de Moscú, Magna producirá parachoques, módulos delanteros, rejillas de radiador y marcos de salpicadero.
El director de la planta, Georgui Rotov, precisó que de momento se fabricarán parachoques para los modelos Skoda Fabia, Skoda Octavia y Volkswagen Polo sedán, según informó la agencia Interfax.
A partir de 2012, la fábrica producirá además componentes para Renault y desde junio de ese mismo año, también para los Peugeot 308 ensamblados en Rusia.
La planta de Kaluga, que comenzó a funcionar a modo de prueba en junio de este año, ocupa una superficie de 15,000 metros cuadrados, se encuentra emplazado en el parque tecnológico de Grabtsevo y cuenta con un total de 200 trabajadores.
Magna International Inc. da empleo a cerca de 90,000 personas en 242 plantas y 76 centros de ingeniería en un total de 25 países.