En las décadas de los 80 y 90, el Mundial de Motociclismo era muy diferente a lo que conocemos hoy día. Los equipos contaban con mucha menos infraestructura y el personal podía ser tan reducido como 6 o 7 miembros.
Como los medios eran más limitados, se contaba con menos repuestos y las propias motos estaban construidas de forma diferente, lo que significaba que el mantenimiento era mucho más complicado.
Los motores y cajas de cambio se desmontaban al completo y acciones como lijar los cilindros y equilibrar los cigüeñales en el propio circuito eran algo común. Si era necesario fabricar o modificar una pieza, se hacía con los medios disponibles allí mismo, lo que muchas veces exigía ejercitar la creatividad.
Este trabajo tan exhaustivo obligaba a los mecánicos a trabajar a destajo durante un GP, dejándoles poco tiempo incluso para algo tan básico como dormir.
Los miembros del equipo están en contacto a lo largo de año, incluso cuando no están en las pistas
Hoy, las cosas son muy diferentes y los equipos cuentan con una cantidad de integrantes que pueden ir de 40 a 50. El motor ya no se abre para realizar el mantenimiento, aunque esto se debe sobre todo a exigencias del reglamento, que prohíbe modificar el motor.
Salvo que reciba un impacto fuerte, es poco probable que los mecánicos desmonten la moto en su totalidad y en caso de necesidad hay repuestos de fácil montaje.
En definitiva trabajo de mantenimiento es menor, lo que permite al equipo centrarse en trabajar en el ajuste en su lugar, invirtiendo la mayor parte del esfuerzo en la difícil tarea de mejorar el rendimiento. Además también se cuenta con personal para tratar la comunicación y relaciones públicas ¡Conceptos casi inexistentes en la competición de los años 80 y 90!
En lo más alto del equipo tenemos al Director de HRC, Tetsuhiro Kuwata así como el Team Manager, Alberto Puig que se encarga de coordinar a todo el personal. El equipo también cuenta con un director técnico, Takeo Yokoyama, antiguo ingeniero de Dani Pedrosa.
Personal técnico
Cada piloto cuenta con alrededor de 5 mecánicos y 5 ingenieros en su equipo particular, y algunos de estos están especializados en campos específicos (Electrónica, telemetría, neumáticos, suspensiones, frenos, etc.). También hay ingenieros y personal de HRC que no trabajan específicamente para cada piloto, sino que orientan su trabajo a apoyar el equipo en su conjunto.
Öhlins, Brembo y Michelín también proveen de personal a cada piloto, para asistir con las suspensiones, frenos y neumáticos respectivamente.
Fuera del box, pero trabajando también con la faceta más técnica del equipo, está el encargado de repuestos, que lleva una minucioso control de las piezas disponibles. Su trabajo es seguir los acontecimientos mediante pantalla y preparar los repuestos necesarios rápidamente en caso de avería. También lleva un control por ordenador del kilometraje de las piezas y cuando será necesario cambiarlas.
Personal de otros campos
No podemos olvidarnos de los miembros del equipo que se encarga de los temas menos técnicos, como los responsables de comunicación y miembros del hospitality. En estas labores trabajan unas 10 personas con todo tipo de trasfondos profesionales, desde cocineros hasta periodistas y responsables de organización.
Por si esto fuese poco, el equipo cuenta con personal que ofrece apoyo a distancia en las oficinas de Saitama en Japón y en el Centro de Tecnología Repsol, en Móstoles.
Un equipo tan internacional como este cuenta con gente de todo tipo de nacionalidades: Japoneses, alemanes, italianos y españoles entre otros, por lo que el idioma usado por norma general es el inglés. Los miembros del equipo están en contacto a lo largo de año, incluso cuando no están en las pistas.
Al fin y al cabo si uno quiere trabajar en el Repsol Honda Team debe ser muy apasionado por el mundo del motor ¡Debe estar dispuesto a trabajar duro y sin descanso!