"Casey es aquí de otro planeta, se le ve que va a un ritmo muy alto y cómodo en todo, controla las derrapadas y acelera muy bien en todas las zonas del circuito, por lo que será muy complicado poder estar con él en la carrera", reconoció Lorenzo.
"Es cierto que estamos más cerca de él, pero en los entrenamientos hicimos un tiempo muy bueno con el neumático blando y lo verdaderamente importante será hacer mañana una buena salida para colocarnos detrás de Casey al llegar a la primera curva, e intentar mantener su ritmo al menos durante las dos primeras vueltas", explicó el líder del mundial, quien de acabar segundo mañana tras el australiano se proclamaría matemáticamente campeón del mundo de MotoGP en 2012.