El piloto gallego, de 18 años, se convirtió el año pasado en el primer español que conquistaba el título mundial de la categoría. Once meses después revalida su corona, para la que le faltaban veinte puntos.
Prado saldrá en la segunda manga de Suecia con la equipación de campeón del mundo y las dos últimas etapas del campeonato, Turquía y China, serán para festejar su nuevo título. Prado ha ganado en todos los grandes premios en los que ha competido (faltó a Gran Bretaña por lesión).
El lucense tomó la delantera desde la salida y mantuvo su posición a lo largo de los treinta minutos más dos vueltas que dura una manga, pese a que su compañero y rival Tom Vialle le estuvo apretando.
La emoción se desató tras la carrera en la recta de salida. Gritos, lágrimas, empujones de periodistas, abrazos con abuelos, hermana, novia, padres y todo su equipo, todos empapados en champán y envueltos por las festivas serpentinas doradas, relata su gabinete de comunicación.
"Soy absolutamente feliz, esto es lo que había soñado siempre. El año pasado fue muy especial porque gané mi primer título, pero este año también ha sido un año de muchísimo trabajo y esfuerzo y estoy muy orgulloso porque nos han salido las cosas muy bien y casi todo ha salido perfecto durante la temporada. Estoy súper agradecido al equipo, a mi familia y a todos los que me apoyan en el día a día, a ellos y a los aficionados les dedico este título", comentó.
En la segunda manga concluyó cuarto, tras el holandés Calvin Vlaanderen, el francés Tom Vialle y el británico Adam Sterry, lo que le impidió ganar el Gran Premio, al acabar con un punto menos que el galo, con lo que no pudo igualar la cifra de catorce victorias consecutivas conseguida por Jeffrey Herlings en 2013.
En el Motocross de las Naciones con el equipo español el piloto lucense debutará en la máxima categoría, MXGP, en la que competirá en 2020 porque el reglamento del Mundial así se lo exige al haber ganado dos títulos en MX2.