En cada Gran Premio, tanto Marc Márquez como Dani Pedrosa necesitan algo más que la moto a la hora de salir a pista. Nos referimos, claro, al mono, los guantes y las botas. Más allá de la simple función de vestirles con los colores del equipo, Alpinestars se encarga de que todo el material de los pilotos cumpla las garantías de seguridad exigidas en el Mundial. ¿Sabes cuántos monos pueden llegar a usar los pilotos del Equipo Repsol en una temporada?
Equipamiento para cada GP
Los pilotos del Equipo Repsol Honda reciben, al menos, cuatro monos para cada carrera, incluyendo el sistema de airbag de carreras Tech-Air. Además de tres pares de botas y un mínimo de tres pares de guantes GP Pro. Igualmente, se entrega tanto a Dani como a Marc un protector de pecho y un protector de espalda para cada GP. Son piezas trabajadas específicamente para responder a las preferencias de cada uno de los pilotos.
A esto se unen cuatro juegos de refuerzos técnicos para el mono con los que completar su equipamiento. Con esto, ¡listos para disputar el Gran Premio!
Rodillas y codos, especialmente sensibles
En cualquier caso, la suma final de monos, guantes o botas empleadas durante el año no es definitiva. Debemos tener en cuenta que todos los pilotos antes o después pueden sufrir un accidente durante los entrenamientos o en las carreras, haciendo que algunas piezas deban ser repuestas inmediatamente.
Lo mismo ocurre con las coderas y las rodilleras, material muy sensible en función del pilotaje de cada piloto. ¡En algunos casos, hay pilotos pueden llegar a usar hasta tres juegos por día para proteger estas partes del cuerpo!
Material reutilizable
En efecto, los monos de competencia están pensados y desarrollados para ser especialmente resistentes. Por lo tanto, generalmente pueden volver a utilizarse de una carrera a otra. Para ello, lógicamente, se actualiza el registro de actividad y son limpiados tanto por fuera como por dentro, además de realizarse exhaustivas revisiones al sistema de airbag.
Si Dani o Marc sufren un accidente en carrera, los trajes se devuelven al Centro de Desarrollo Alpinestars Racing, situado en el norte de Italia, para que se lleve a cabo una inspección rigurosa de los daños y, si es posible, para que se repare. Si se consigue, se actualiza el registro de actividad y el traje se prepara para ser enviado y utilizado en el siguiente Gran Premio.
Minuciosos en desarrollo y en calendario
La exactitud en cada paso es una de las reglas básicas a la hora de diseñar estas piezas. Primero porque el margen de diferencia entre cada mono, guante o bota debe ser nulo. Es lo que se conoce como un “margen de tolerancia” escrupulosamente reducido. Todo el equipamiento debe ser idéntico.
Debemos pensar que con el nivel de exigencia que deben soportar los pilotos de MotoGP, tanto la comodidad como su seguridad deben ser máximas. Además, los pilotos son muy sensibles al más mínimo cambio, por lo que los protocolos de producción son verdaderamente estrictos a fin de asegurar que todo se hace siguiendo sus peticiones.
El otro aspecto a tener en cuenta es la logística. Todo el equipamiento necesario para cada GP se entrega, en la medida de lo posible, tres días antes. Además, son entregados en mano directamente en el circuito, lo cual garantiza la perfecta llegada del material, sin posibles fallos provocados por envíos no controlados.