"Se está redefiniendo la zona de seguridad y estamos trabajando en primera instancia (...) para poder reparar todas las casas de las personas que fueron afectadas", declaró a periodistas el directivo, al indicar que ya han sido entregadas 128 viviendas y en los próximos 15 días esperan entregar "más de 200".
La refinería de Amuay, en Punto Fijo (noroeste), sufrió una explosión el 25 de agosto que dejó más de un millar de viviendas afectadas en los alrededores con un saldo parcial de 42 muertos, 8 desaparecidos y más de un centenar de heridos.
La mayor parte de las víctimas se produjeron en las instalaciones del Destacamento 44 de la Guardia Nacional (policía militarizada), un complejo militar que incluía viviendas, y que estaba encargado de la custodia del centro.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, reconoció ayer en una rueda de prensa que "un error" que se cometió en Amuay "y nadie lo detectó a tiempo es lamentable, triste y trágicamente que el comando de la guardia estaba muy cerca de esa zona".
Luongo declaró que la planta, que integra el Centro Refinador Paraguaná (CRP), el mayor de Venezuela y uno de los más grandes del mundo, ya está produciendo unos 264,000 barriles diarios y "debe estar completamente lista" en una semana.
Confirmó, durante su exposición en el II Congreso Integral de Hidrocarburos, que al momento del accidente Amuay tenía una producción de 450,000 barriles diarios, con cuatro unidades de destilación en servicio y otra que permanecía detenida por una reparación a un equipo.
Amuay, situada en la península de Paraguaná, estado Falcón (oeste), tiene capacidad para refinar 645,000 barriles de petróleo diarios.