"Yo tomé un conjunto de acciones por propuesta del gobernador (de Carabobo Rafael) Lacava para la recuperación y el reinicio de actividades productivas de la empresa Goodyear de Venezuela", dijo Maduro en un acto de trabajo transmitido por la televisión estatal VTV.
Goodyear de Venezuela anunció el 10 de diciembre de 2018 a sus casi 1,200 trabajadores que se veía "forzada a cesar sus operaciones" y cerrar su única planta en Venezuela.
A través de un comunicado, la empresa también alertó que desde ese día nadie estaba "autorizado a producir ninguna de las marcas Goodyear (Goodyear/Kelly) en Venezuela".
Entonces, Goodyear producía en Venezuela entre 1,500 y 1,900 neumáticos por día, pese a tener capacidad para 10,500, según dijo el sindicalista Luis Lovera.
Hoy, el teniente coronel Antonio Pérez Suárez, responsable gubernamental en la planta, dijo en la misma transmisión en la que habló Maduro que la planta produce 15,000 neumáticos mensuales, unos 500 cada día.
También dijo que los antiguos dueños cerraron la planta "pretendiendo causarle así un daño a los trabajadores" y al país.
"Para inicios de 2020 debemos estar dando un salto a 30,000 cauchos (llantas) mensuales y ya para inicios del segundo trimestre de 2020 debemos estar en una producción de 60,000 cauchos mensuales", añadió.
Venezuela, el país con las mayores reservas probadas de crudo en el planeta, atraviesa por una severa crisis económica que se traduce en alta inflación y escasez cíclica de diversos productos.
Dentro de esta crisis el sector automotriz también se ha visto severamente afectado.
La principal patronal de Venezuela, Fedecámaras, ha asegurado que en los últimos 20 años de gobierno chavista en el país han cesado operaciones más de 1,000 empresas de todas las áreas, producto de la crisis y los controles del Estado sobre la empresa privada.