Estados Unidos calificó el jueves como "catástrofe nacional" el vertido, y el estado de Luisiana, en el sur, declaró el estado de emergencia, con objeto proteger las costas, adonde llegó hoy ya la marea negra.
La mancha, causada hace diez días por la explosión y hundimiento de la plataforma petrolera Deep Horizon, de la empresa Transocean, "se ha dispersado hacia el este y el noroeste, en dirección a la costa de Luisiana, con una longitud y ancho aproximados de 195.3 y 83.7 kilómetros", explicó la secretaría en un comunicado.
Según las previsiones meteorológicas y oceanográficas para los dos próximos días, la marea negra continuará rumbo al noroeste y en dirección a la costa de Luisiana, en el sur de Estados Unidos.
Esto se debe, según la Marina mexicana, a vientos del sureste de hasta 46 kilómetros por hora y olas de hasta 2.4 metros de altura.
Hasta el momento, "la situación no representa ningún riesgo para las aguas mexicanas", añade Sin embargo, la Dirección General Adjunta de Oceanografía, Hidrografía y Meteorología de México hará un "seguimiento continuo de esta contingencia", añade la nota.
La explosión de la plataforma ocurrió a unos 80 kilómetros de la costa de Luisiana, lo que provocó una fuga de crudo procedente de una profundidad de 740 metros en el Golfo de México.