En declaraciones difundidas por la agencia local de noticias iraní, Mehr, Nikzad informó de que dicha exportación "será frenada a los países europeos que tomaron decisiones hostiles en contra de Irán".
El portavoz explicó que "a pesar de la petición de algunos países europeos de comprar petróleo y gas condensado no se venderá ningún cargamento e estos países" y aseguró que en la actualidad la exportación y producción del crudo iraní se encuentran en una situación natural y favorable.
Nikzad afirmó que esta prohibición continuará hasta que los países europeos y occidentales "dejen sus políticas hostiles en contra de Irán".
Según Nikzad, Irán en sus nuevos contratos que obtiene con diferentes países del mundo pregunta por el destino, donde se consume o se traslada el producto, y les ha pedido que no lo trasladen a países europeos.
"Esperamos que todos los compradores extranjeros de petróleo del país, se adhieran a los compromisos que tienen con el Ministerio de Petróleo iraní y no lo trasladen ni lo vendan a países europeos", aclaró el responsable.
Irán está sometido a sanciones de la ONU por su programa nuclear, que algunos países, con Estados Unidos a la cabeza, creen que puede tener fines armamentistas, mientras Teherán lo niega y afirma que es exclusivamente para uso civil y pacífico.
El pasado 19 de febrero Irán, al considerar al Reino Unido y Francia como países promotores de las últimas sanciones, suspendió sus exportaciones de crudo a esos países.
Dos días más tarde, el ministro de Petróleo, Rostam Qasemi, advirtió a los países de la UE que Irán les cortará en un plazo muy breve el suministro de crudo si no firmaban contratos a largo plazo y con pago garantizado.