Los accidentes vehiculares asociados al consumo de alcohol representan un grave problema social que afecta no sólo a los conductores y acompañantes sino también a otros automovilistas y peatones, destacó la diputada quien especificó que tan sólo los fines de semana se movilizan aproximadamente 200,000 conductores bajo la influencia del alcohol, motivo por el cual mueren al año 24,000 personas.
En ese sentido el programa Conduce Sin Alcohol, implementado en 2003, tiene el objetivo de prevenir accidentes y muertes relacionadas con la conducción de vehículos automotores bajo los influjos del alcohol o algún estupefaciente.
De acuerdo con el portal de la SSPCDMX, desde el inicio de su implementación y hasta la fecha ha contribuido a reducir un 30 por ciento el índice de percances fatales principalmente entre jóvenes.
Asimismo, los incidentes automovilísticos representan una carga en cuanto a la pérdida de años de vida productiva, al ser la primera causa de muerte en niños de entre 5 y 9 años de edad y la segunda entre adolescentes de 10 a 19 años.
La legisladora contextualizó que el Congreso del Estado de México decidió modificar el Código Penal, derogando el Artículo 148 bis, el cual imponía una sanción de 3 años a 6 años de prisión y una multa de 500 a dos mil días de salario mínimo a quien venda o suministre bebidas alcohólicas sin contar con la licencia de funcionamiento.
A este punto de acuerdo se adhirieron los diputados José Alfonso Suárez del Real, de Morena, Francis Pirín Cigarrero, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Carlos Alfonso Candelaria López, del Partido Encuentro Social (PES).