"Libertad para los Arctic 30", se leía en banderas amarillas. Los botes navegaron en dirección al Kremlin, en el corazón de la capital rusa, informó la organización en Twitter.
Con la protesta, Greenpeace quería llamar la atención pública ante el inicio hoy de un proceso sobre el tema ante el Tribunal Internacional del Mar en Hamburgo.
Holanda, país de bandera del barco "Arctic Sunrise", que se encuentra retenido en Rusia, pide su liberación, así como la de los 30 detenidos, entre ellos dos argentinos y una brasileña. Rusia desconoce la autoridad de los jueces y no participó en la primera audiencia para boicotear el proceso.
Los 30 están detenidos desde que intentaron subir a una plataforma petrolera a mediados de septiembre para protestar por las perforaciones en el Ártico. La Justicia rusa los acusa de vandalismo, por lo que podrían ser condenados a hasta siete años de cárcel.