Los eurodiputados aprobaron un informe no legislativo en el que reclaman a la Comisión Europea (CE) que presente una propuesta para hacer obligatorio el uso de estos dispositivos, conocidos como eCall en inglés.
Estos aparatos permiten acelerar la llegada de los servicios de emergencia al lugar del siniestro, lo que podría salvar hasta 2,500 vidas al año y reducir la gravedad de las heridas entre un 10 y un 15 por ciento, según datos de la Eurocámara.
El sistema aprovecha la conocida como "hora de oro", es decir, los 60 minutos siguientes a que se produzca un accidente, que resultan críticos para salvar a las víctimas del siniestro y lograr que las heridas sufridas se agraven lo menos posible
El Parlamento Europeo reconoce que la introducción de estos aparatos tendrá un coste, pero recalca que son más importantes los beneficios que ofrecen.
Además, señala que si no se hace obligatoria la introducción de estos dispositivos, "el sistema de llamada eCall solamente beneficiará a aquellas personas que puedan permitirse adquirir vehículos de alta gama".
El objetivo de introducir por ley su uso es que se abaraten los costes y se implanten en toda la Unión Europea.
Por el momento, solo el 0.4 por ciento de los coches europeos tiene instalado un sistema de este tipo.
El informe pide también que se mejore el funcionamiento de los servicios de emergencia del 112, debido a los distintos rendimientos que presenta en los Veintisiete.