Este lunes el ministro de Finanzas griego, Yanis Varoufakis, dio a conocer su dimisión para facilitar un acuerdo con los acreedores.
"Poco después de anunciar los resultados del referéndum se me comunicó que había ciertas preferencias de algunos participantes del Eurogrupo de que sería mejor que no estuviera presente en estas reuniones, una idea que el primer ministro consideró potencialmente útil", dijo Varoufakis a través de su blog.
La dimisión, agrega, probablemente pueda ayudar al primer ministro, Alexis Tsipras, a alcanzar un acuerdo con los acreedores. "Por ese motivo dejo hoy el Ministerio de Finanzas", explicó Varoufakis.
"Considero que es mi deber ayudar a Alexis Tsipras a explotar el capital que el pueblo griego nos garantizó ayer en el referéndum", añadió. Varoufakis anunció que llevará "con orgullo el aborrecimiento" de los acreedores. "Nosotros en la izquierda sabemos cómo actuar colectivamente sin poner el interés en los privilegios del cargo. Respaldaré plenamente al primer ministro Tsipras, al nuevo ministro de Finanzas y a nuestro gobierno", agregó.
Originalmente el ministro de Finanzas griego había dicho que dejaría su cargo si ganaba el "sí" en el referendo del domingo 5 de julio.
Desde que asumió en enero el gobierno izquierdista, Varoufakis ha sido la figura más controvertida en el extranjero, y en las reuniones del Eurogrupo muchos ministros se quejaban más o menos abiertamente de que era por lo menos difícil colaborar con el titular griego.
Esto llevó a que en abril Tsipras decidiera reducir su papel en las negociaciones en Bruselas dejando de facto al mando de las conversaciones al viceministro de Relaciones Internacionales Económicas, Euclidis Tsakalotos.