PDVSA y Chevron firmaron ayer los términos de ese "financiamiento de 2,000 millones de dólares" por parte de la empresa estadounidense a la empresa mixta Petroboscan, creada en 2006, dijo la empresa estatal venezolana en un comunicado.
Indicó que los 2,000 millones de dólares de Chevron supondrán una inversión "a largo plazo", cuyo último repago está previsto para 2025, y "tendrá una tasa igual a LIBOR + 4.5 sin otros costos adicionales".
Esos recursos ayudarán a financiar "obras para mantener y aumentar la actual producción de crudo promedio de 115,000 barriles de petróleo diarios del campo Boscán" de la Faja Petrolífera del Orinoco, añadió.
El acuerdo contempla "el pago de obligaciones pendientes de Petroboscan", cuyo monto no se revela, y la canalización de ventas de los ingresos por ventas de hidrocarburos para asegurar la financiación de la empresa mixta.
Chevron-Texaco es la única petrolera estadounidense que hace seis años aceptó la fórmula impuesta por el gobierno a las empresas privadas para que conformaran compañías mixtas con PDVSA para seguir explotando el crudo venezolano, lo que fue rechazado por Conoco-Phillips y Exxon, que se fueron del país.
Entre otras que también aceptaron asociarse con PDVSA para no verse marginadas de la explotación de crudo de la rica Faja Petrolífera del Orinoco (sureste) figuran British Petroleum (BP), la francesa Total, la italiana ENI, la noruega Statoil y la china CNPC.
El presidente para América Latina y África de Chevron, Ali Moshiri, dijo en septiembre pasado en Venezuela que la nación suramericana es "única" en recursos naturales, por lo que era un destino "lógico" de la empresa para invertir.
Agregó entonces que la empresa tenía voluntad de incrementar los proyectos en Venezuela.
Recientes certificaciones internacionales reveladas por PDVSA han confirmado a Venezuela como el mayor depósito mundial de crudo, con casi 300,000 millones de barriles, lo que representa alrededor del 25 % del petróleo que existe en el planeta.
Ese volumen de crudo recuperable se encuentra principalmente en la Faja Petrolífera del Orinoco y supera las reservas probadas de 265,000 millones de barriles de Arabia Saudí, hasta ahora considerado el mayor país petrolero del mundo.