En un encuentro con habitantes del centro de Puerto Vallarta, colaboradores del municipio, representantes de las áreas de cultura, administración, finanzas y obras públicas del Ayuntamiento de Puerto Vallarta, se efectuó el foro denominado “Primer Semana de la Movilidad”.
En este espacio, el Centro de Transporte Sustentable (CTS) México expuso algunas experiencias que en nuestro país y en otros lugares del mundo demuestran que con determinación y con voluntad política, se pueden hacer cambios que mejoren la calidad de vida de los habitantes de las ciudades y sin necesidad de llevar a cabo obras “faraónicas”, sino más bien a través de “acupuntura urbana” que logren modificaciones rápidas y significativas.
El mensaje del ejecutivo municipal enfatizó que aunque por años se ha argumentado falta de recursos para lograr cambios importantes en las ciudades, se tiene que hacer la gestión necesaria para lograrlo, porque la movilidad es un tema que debe concitar el esfuerzo de la federación, del estado, de las administraciones locales y de la sociedad civil; por lo que señaló “se tiene que lograr con, sin y a pesar de las administraciones”.
Antonio de León Góngora, director de Consultores en Sistemas Integrales de Vialidad (Consivi) expuso que se deben generar políticas públicas que permitan revertir la histórica tendencia de movilidad en las ciudades donde lo que se ha hecho es otorgar el espacio público a los autos en lugar de a las personas.
Señaló el consultor que “esta administración está generando una política diferente sobre el tema de la movilidad urbana, que inicia en el centro histórico” pero que se extenderá al polígono poniente y también afirmó que en “septiembre se tendrá un programa integral de movilidad en la ciudad”.
De León informó que en el primer cuadro del municipio el nivel de rotación que se da en los estacionamientos es casi nulo. Además comunicó que de los cajones de estacionamiento que existen en la vía pública, en el centro de Vallarta, 182 los utilizan los burócratas de la ciudad. Además criticó el hecho de que en una calle de afluencia importante como la calle Morelos existen 397 cajones que son para los taxis. El empresario cuestionó: "¿Por qué tienen ese espacio, es de ellos la calle?"
“Tenemos la oportunidad de hacer algo ahora por Puerto Vallarta y darle la proyección que necesita o podemos no hacer nada y perder esta importante oportunidad”, concluyó el consultor, quien hace tres años ganó un premio internacional auspiciado por la Organización Mundial de la Salud, gracias a la recuperación de espacios públicos en Tulancingo, Hidalgo.
Alejandra Acosta, gerente de Movilidad y Desarrollo Urbano del CTS México, informó que en Puerto Vallarta en 1994 el parque vehicular era de 9,242 vehículos y en 2007 alcanzó los 63,000, lo que expuso la experta, es como si diario entraran 11 vehículos a la ciudad y se quedaran en ella. Se trata también de un tema de salud pública dijo, ya que “es probable que no lo sepan, pero los accidentes viales fatales son la quinta causa de muerte en esta ciudad”.
Este patrón no puede seguir, el panorama es desolador, sin embargo, señaló Acosta, es una excelente noticia de las autoridades municipales y la Consivi porque no se trata de hacer las grandes obras, sino de implementar acciones que mejoren la seguridad vial, el transporte y la calidad de vida. Movilidad urbana es un tema mucho más amplio que el hecho de abordar una ruta, se trata de un tema que impacta notablemente la vida de las personas.
Para lograrlo, no existen reglas, ni manuales, ni recetas, cada ciudad tiene particularidades y contextos, se tienen que hacer proyectos innovadores que se adecuen a la problemática local; se tienen que discutir los planes, pero no perder la oportunidad de efectuar “acupuntura urbana”. No es necesario proyectos de millones y millones de pesos, se pueden hacer intervenciones a nivel estructural, de largo plazo y temas más fáciles que van a mejorar la calidad de vida de las personas: mejorar un cruce, la señalización, las banquetas para los peatones.
La integrante del CTS México exhortó al involucramiento ciudadano: “revisen el marco legal, involúcrense con las propuestas, se tiene que dar un equilibrio en el espacio público, donde todos los modos de transporte puedan convivir. Cuando se construyen ciudades, se construyen formas de vida ¿En qué tipo de ciudad queremos vivir?”, concluyó.