Lo anterior se desprende del estudio "Perspectivas de la Alta Dirección en México 2019", elaborado por la empresa KPMG, y cuyos resultados fueron presentados hoy por Roberto Cabrera, socio líder nacional de Asesoría de KPMG en México, y Celin Zorrilla, socio líder de Industrias y Mercado de KPMG en México.
"Llevamos 14 años presentando este documento, tanto a la comunidad empresarial, como a nuestros clientes y clientes potenciales, con el objetivo de tener marcos de referencia", dijo Roberto Cabrera, quien explicó que la edición 2019 de este estudio contó con la participación récord de 993 directivos.
Celin Zorrila detalló que los resultados de esta edición fueron levantados del 1 de octubre de 2018 al 18 de enero de 2019, siendo el perfil de los encuestados: 43 por ciento director, 15 por ciento presidente, 14 por ciento gerente, 10 por ciento miembro de comité o consejo, 5 por ciento subdirector, 4 por ciento vicepresidente y 9 por ciento otro.
Mientras que el perfil de las industrias fue de la siguiente manera: 16 por ciento servicios, 11 por ciento servicios financieros, 10 por ciento manufactura / industrial, 7 por ciento inmobiliaria / real estate, 6 por ciento energía y recursos naturales, 6 por ciento construcción / infraestructura, 5 por ciento automotriz, 5 por ciento alimentos y bebidas, 4 por ciento consumo / retail, 4 por ciento química / farmacéutica, 3 por ciento electrónicos / software, 3 por ciento salud, 3 por ciento transporte, 2 por ciento telecomunicaciones, 2 por ciento hotelería y turismo, 2 por ciento entidades no lucrativas, 1 por ciento comunicaciones, 1 por ciento outsourcing, 1 por ciento medios de comunicación, 1 por ciento gobierno, y 7 por ciento otra.
Resultados
Con respecto a los resultados del estudio, Roberto Cabrera dio a conocer que 54 por ciento de los empresarios consultados consideraron que este año la economía del país estará pero que en el año pasado, mientras que 31 por ciento dijo que estará igual y un 15 por ciento señaló que mejorará.
Sin embargo, la percepción de la Alta Dirección en México muestra una postura de optimismo moderado para sus organizaciones, pues indicaron que esperan que su negocio crezca en 2019; en este rubro, un 36 por ciento consideró que su empresa crecerá de entre uno a cinco por ciento, un 26 por ciento aseguró que crecerán entre 6 y 9 por ciento y un 25 por ciento afirmó que crecerán igual o más de 10 por ciento; solamente 10 por ciento de los consultados respondieron que no habrá crecimiento, mientras que un 3 por ciento apuntaron que habrá decrecimiento.
En opinión de la Alta Dirección, las tres principales variables que México necesita para incrementar su competitividad son: 80 por ciento “Combate a la corrupción” (82 por ciento, en 2018), 58 por ciento “Mejoramiento de la seguridad pública” (60 por ciento, en 2018), 53 por ciento “Fortalecimiento del Estado de derecho” (54 por ciento, en 2018).
Roberto Cabrera comentó que para 2019, "la percepción es de un optimismo moderado; vemos que la Alta Dirección en México espera que las organizaciones crezcan enfocándose en cuatro grandes temas: centralidad en el cliente, innovación, talento y eficiencia, con base en esfuerzos colaborativos tanto al interior como al exterior de las empresas, al mismo tiempo que incorporen tecnologías disruptivas para incrementar su competitividad y rentabilidad a largo plazo”.
En otra pregunta, cinco de cada 10 directivos (52 por ciento, vs. 49 por ciento en 2018) comentan que sus decisiones de inversión se han mantenido, a pesar del ambiente de inseguridad, mientras que un 40 por ciento (vs. 41 por ciento en 2018) señalaron que se han reducido, y 8 por ciento (vs. 10 por ciento en 2018), que se han suspendido.
Con respecto a la actualización del TLCAN (hoy T-MEC), 55 por ciento de la Alta Dirección considera que el impacto operativo para su empresa será positivo, y solo 10 por ciento estima que será negativo.
Por lo que respecta a la Ley de Ingresos y régimen fiscal, seis de cada diez encuestados (61 por ciento) opinan que la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio de 2019 no impulsará la competitividad y el crecimiento de su organización.
El régimen fiscal en México es calificado por 14 por ciento de la Alta Dirección como bueno (vs. 13 por ciento en 2018), y por 52 por ciento como regular (vs. 47 por ciento en 2018).
Ante la pregunta “¿Qué impacto tendrá el nuevo gobierno en la competitividad de su organización durante 2019?”, 60 por ciento considera que será “Negativo”; 20 por ciento que será “Positivo”, y 20 por ciento, que será “Nulo/Ninguno”.
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Las principal razón de quienes señalaron un impacto positivo del nuevo gobierno en sus organizaciones es: “Aumento del consumo interno” (45 por ciento); aquellos que consideran un impacto negativo mencionaron: “Inestabilidad económica” (50 por ciento).
En el tema de las reformas en la agenda directiva, solo 18 por ciento (vs. 25 por ciento en 2018) de la Alta Dirección considera que las “reformas estructurales” son una de las variables que México requiere para incrementar su competitividad. La Reforma Fiscal se mantiene en primer lugar (71%), seguida de la Educativa (50 por ciento).
Oportunidades y amenazas
Las tres principales oportunidades que identifica la Alta Dirección son:
1) “Los requerimientos de nuevos clientes” (90 por ciento).
2) “El desarrollo sostenible” (88 por ciento).
3) “La tecnología como disruptor del modelo de negocio” (86 por ciento).
Las tres principales amenazas son:
1) “El inicio de una nueva administración en nuestro país” (51 por ciento).
2) “Los cambios regulatorios” (39 por ciento).
3) “Una mayor competencia” (24 por ciento).
Estrategia empresarial
Roberto Cabrera agregó que la Alta Dirección muestra una gran consistencia en cuanto a las acciones que llevará a cabo durante los próximos tres años para incrementar la competitividad, utilidades y crecimiento, siendo las cinco estrategias principales para lograr una mayor competitividad:
1) Centrarse en el cliente (63 por ciento).
2) Desarrollar nuevos productos o líneas de negocio (50 por ciento).
3) Desarrollar y retener al talento (46 por ciento).
4) Mejorar los procesos y el desempeño (39 por ciento).
5) Enfocarse en la innovación y promoverla (39 por ciento).
Por otra parte, los principales factores que contribuirán a que las organizaciones generen mayores utilidades en los próximos tres años son: “Centrarse en el cliente” (57 por ciento), “Desarrollar nuevos productos o líneas de negocio” (44 por ciento), “Mejorar los procesos y el desempeño” (44 por ciento), “Reducir costos” (38 por ciento) y “Desarrollar y retener al talento” (33 por ciento).
Así mismo, las tres acciones más relevantes para lograr el crecimiento de las organizaciones en los próximos tres años son: “Construir relaciones cercanas con clientes mediante programas de lealtad y servicio” (89 por ciento), “Desarrollar y retener al talento” (87 por ciento) y “Desarrollar nuevos productos, servicios y soluciones” (85 por ciento).
Mercados: geografía sin límites
En un contexto de cautela, 54 por ciento (52 por ciento, en 2018) de la Alta Dirección planea expandir sus operaciones en algún estado de la República en los próximos tres años, y 29 por ciento (31 por ciento, en 2018), lo planea hacer en otros países
Los 5 principales destinos de inversión al interior de la República son:
1) 33 por ciento “Querétaro” (28 por ciento, en 2018).
2) 28 por ciento “Guanajuato” (23 por ciento, en 2018).
3) 27 por ciento “Nuevo León” (25 por ciento, en 2018).
4) 27 por ciento “Jalisco” (22 por ciento, en 2018).
5) 26 por ciento “Estado de México” (21 por ciento, en 2018).
Los 5 países donde las organizaciones planean invertir son:
1) 40 por ciento “Estados Unidos” (39 por ciento, en 2018).
2) 25 por ciento “Colombia” (23 por ciento, en 2018).
3) 15 por ciento “Perú” (17 por ciento, en 2018).
4) 14 por ciento “Brasil” (8 por ciento, en 2018).
5) 13 por ciento “España” (10 por ciento, en 2018).
Cabrera destacó que, “por primera vez en varios años, la Alta Dirección en México considera un país europeo entre los primeros cinco destinos de inversión, algo positivo que podría convertirse en una tendencia para disminuir la dependencia de Estados Unidos”.
En cuanto a fuentes de financiamiento, en 2019 se aprecia una ligera caída en la demanda de financiamiento externo para consolidar el crecimiento de las empresas (48 por ciento, 54 por ciento en 2018. Los 5 principales vehículos a los que prefiere recurrir la Alta Dirección son: 70 por ciento “Instituciones financieras” (71 por ciento, en 2018), 44 por ciento “Socios estratégicos” (54 por ciento, en 2018), 23 por ciento “Fondos de capital” (31 por ciento, en 2018), 19 por ciento “Proveedores” (49 por ciento, en 2018) y 16 por ciento “Colocación de bonos o acciones en la bolsa” (24 por ciento, en 2018).
Innovación y transformación
“La innovación se ha convertido en la estrategia clave para las organizaciones debido a la necesidad de generar experiencias satisfactorias para los clientes, que cada día son más exigentes, están mejor informados y demandan servicios de mayor calidad”, afirmó Roberto Cabrera.
Ante la pregunta “¿Qué concepto describe mejor el enfoque de su organización en temas de innovación?”, los directivos respondieron: 51 por ciento la considera como “Estratégica”, ya que permea en todas las actividades de la organización, 42 por ciento afirma que se aplica “A la medida”, en algunos proyectos o áreas del negocio, y solo 7 por ciento considera que es “Escasa”, debido a que su empresa no tiene un enfoque innovador.
Frente a la pregunta “¿Cómo se promueve la innovación en su empresa?”, la Alta Dirección señala que se hace por medio de: “Fomento de una cultura de innovación” (66 por ciento), “Procesos continuos de implementación y comercialización de nuevos productos y servicios” (63 por ciento), y “Colaboración con socios estratégicos” (58 por ciento).
En otro tema, solo 69 por ciento (68 por ciento, en 2018) cuenta con una estrategia específica en el tema de tecnologías de la información. Las iniciativas tecnológicas para mejorar la competitividad en los próximos tres años son: Data & analytics (84 por ciento), Internet de las cosas (IoT) (44 por ciento), Nube híbrida (34 por ciento) e Inteligencia artificial (33 por ciento).
Más de la mitad de las organizaciones (55 por ciento) revelan que no aprovechan las tecnologías disruptivas. Entre quienes aprovechan las nuevas tecnologías para lograr la transformación digital, solo 8 por ciento afirma haber alcanzado un alto nivel de integración digital.
En este sentido, 58 por ciento de las organizaciones aprovechan las tecnologías disruptivas para mejorar su interacción con clientes y grupos de interés, 49 por ciento para apoyar la cultura organizacional, y 48 por ciento para incrementar las ventas, así como la oferta de productos o servicios.