De acuerdo con el estudio, las metrópolis peor valoradas en cuanto a movilidad por sus ciudadanos son México, D.F., las chinas Shenzen y Pekín, y Nairobi.
A nivel global, la encuesta evidencia que, si bien la congestión del tráfico se ha reducido, el impacto negativo sobre la salud ha aumentado según el 69 por ciento de los encuestados.
Sobre este hecho constado, un 42 por ciento reconoce que ha aumentado el estrés y el 35 por ciento los ataques de ira, en tanto que en países como China e India, se ponen de manifiesto, como principal preocupación, los problemas respiratorios, debido a la congestión del tráfico.
El informe expone que las ciudades con tráfico rodado menos hostiles para sus ciudadanos son, en primer lugar, la canadiense Montreal, seguida de Londres, Chicago, Estocolmo, Toronto y Nueva York, como las grandes urbes que preceden a Madrid.
Montreal es ciudad mejor valorada en cuanto a la eficiencia de sus servicios de transporte, es decir el tiempo que los ciudadanos emplean en trasladarse de sus domicilios a los centros de trabajo.
Como conclusión general del informe de IBM se señala que los distintos mecanismos de transporte en las grandes ciudades ha mejorado sensiblemente en los últimos años.
No obstante, casi como una paradoja, se han incrementado "exponencialmente" las quejas de los conductores en relación al tiempo invertido en desplazamientos y al impacto en su salud.
El uso del transporte público es un objetivo todavía con amplio recorrido, pues sólo un 35 por ciento de los encuestados en todo el mundo ha cambiado su forma de dirigirse al trabajo o a sus actividades académicas en el último año, y de éstos, menos de la mitad, el 45 por ciento, optaron por utilizar el transporte público.
El informe de IBM parte de una encuesta a 8,042 conductores de 20 ciudades de los cinco continentes.