“Mi mandato del 25 de enero (cuando fue electo) ha vencido. Ahora el pueblo debe pronunciarse. Ustedes con su voto decidirán si negociamos bien o no”, aseveró el también líder del partido de izquierda Syriza.
“Hicimos lo que pudimos (...) Hemos logrado mejores acuerdos sobre el presupuesto (...) Hemos ganado muchas cosas en esta batalla, pero no hemos logrado ganar lo que queríamos desde el principio”, añadió.
El primer ministro señaló que ahora el pueblo griego deberá decidir con su voto “quién debe conducir a Grecia al camino difícil, pero con la esperanza que se abre” y qué fuerza política “negociará mejor la reducción de la deuda”.
“Pido un mandato fuerte para un gobierno estable”, sostuvo Tsipras, quien manifestó que presentará su dimisión y la de su gobierno al presidente griego Prokopis Pavlopoulos.
Asimismo se comprometió a que, en el marco del programa de rescate para Grecia, habrá medidas para atenuar el impacto de la recesión a la que conducirán los ajustes previstos en el plan.
“No conseguimos el acuerdo que queríamos, pero dada la situación, conseguimos lo mejor posible”, indicó el primer ministro dimitente, quien aseguró sentirse “orgulloso de la negociación” de su gobierno con los acreedores de Grecia.
Destacó que los acreedores proponían en un inicio “un periodo de financiación de cinco meses”, junto con medidas como “la eliminación de las ayudas sociales”, pero su gobierno logró “un acuerdo de tres años”.
Tsipras anticipó que si su partido resulta ganador en las próximas elecciones, seguirán luchando contra la corrupción y la evasión fiscal.