A fin de aclarar “información inexacta” difundida por algunos medios de comunicación, el instituto central afirmó que en ningún momento interrumpió sus procesos críticos como distribución de efectivo, operaciones en los mercados financieros y cambiarios dentro y fuera del país, operaciones de mercado abierto y sistemas de pagos electrónicos, como SPEI.
Precisó que algunos de sus inmuebles en el Centro Histórico de la Ciudad de México están en proceso de ser evaluados a toda profundidad por los peritos, para determinar si pueden ser ocupados con plena seguridad por el personal que labora usualmente en ellos.
Preliminarmente, se anticipa que dichos edificios puedan ser ocupados durante la próxima semana, añadió el banco central en un comunicado.
Señaló que el personal que desempeña labores esenciales y críticas de su operación, en los casos que ha sido necesario, ha sido reubicado a instalaciones alternas, previstos dentro del plan de continuidad operativa de la institución.