Pezzini consideró que es necesario dejar atrás un sistema paternalista en el que las naciones desarrolladas solo envían dinero a los países en desarrollo para transitar a un intercambio de experiencias para afrontar problemas en común.
"Este nuevo modelo no está basado en que hay uno que da y otro que recibe. Es necesario un modelo de intercambio entre socios", comentó en entrevista a Efe durante una visita a Madrid.
El especialista italiano explicó que está lógica ya no funciona porque se ha descubierto que la pobreza no se resuelve "simplemente con darle dinero a la gente", como muestran las economías latinoamericanas que han crecido sin reducir la desigualdad, como Chile y Uruguay.
Añadió que Latinoamérica está atrapada en "varios círculos viciosos", como "trampas" de productividad y de falta de confianza en las instituciones, que impiden que sus ciudadanos se desarrollen pese a mejorar sus ingresos.
Agregó que la región se ha vuelto dependiente de la producción de recursos naturales sin evolucionar en una sociedad más igualitaria en la que los jóvenes puedan encontrar empleo más allá de la manufactura o el campo.
"Es claro que América Latina necesita una cooperación internacional en este marco", ya que lo que ocurra en la región acabará afectado a las demás regiones, "porque estamos todos mucho más interconectados", apuntó.
Pezzini expresó que los organismos internacionales deben entender que "el mundo ha cambiado" por las economías emergentes, en especial China, que ahora es el principal socio comercial de África y de muchos países de Sudamérica.
El gigante asiático ha modificado las relaciones internacionales porque ha desafiado el modelo clásico de las potencias tradicionales, explicó.
"Por ejemplo, China tiene una línea que dice que uno no debe interferir con la situación política de los países en los que va a intervenir. China dice que su tipo de intervención es mucho más genuina", mencionó.
En el caso de Europa, argumentó, el dilema no es si los gobiernos deben cooperar con China o no, sino cómo lo harán, pues el gigante asiático ya está presente en los países del este europeo con las Nuevas Rutas de la Seda, además de proyectos con Grecia, Portugal e Italia.
Pezzini consideró que la realidad ya rebasó a las advertencias que ha hecho Estados Unidos sobre los riesgos de la tecnología china, pues ya ha avanzado mucho en paneles solares, medicina y la carrera espacial, por lo que es necesario acercarse a ella.
"¿Debemos cooperar con China sobre la tecnología en general? Por supuesto que sí. La tecnología puede ser un beneficio o un problema, como todo. Entonces uno debe cooperar como coopera con los otros países en este campo", aseguró.
El alto funcionario de la OCDE indicó que esto sucedió porque era "una tontería" pensar que China era país incapaz de innovar porque solo se dedicaba a copiar sin las mismas libertades que Occidente, una idea que hoy "está contradicha por los hechos".