En España, donde la reducción fue de dos décimas con respecto a diciembre, la inflación del 1 por ciento en enero fue una de las más bajas de los grandes países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con las excepciones de Japón (0.2 por ciento) y de Italia (0.9 por ciento).
Entre los que experimentaron una desaceleración más intensa en el primer mes del año destacaron Canadá (seis décimas menos, al 1.4 por ciento), Francia (cuatro décimas menos, al 1.2 por ciento) o Estados Unidos (tres décimas, al 1.6 por ciento), señaló la organización en un comunicado.
Fuera de la OCDE, entre las grandes economías emergentes se desmarcaron del movimiento de desaceleración Brasil (la inflación subió una décima al 3.8 por ciento), Rusia (siete décimas más, al 5 por ciento), India (ocho décimas más, al 6.6 por ciento) y, sobre todo, Argentina (1.7 puntos más, al 49.3 por ciento).