En sus dos últimos encuentros, en junio y septiembre, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés) decidió rebajar el precio del dinero de manera consecutiva ante la ralentización del crecimiento global, la "incertidumbre" comercial y el acoso del presidente estadounidense, Donald Trump.
Sin embargo, la última decisión de reducir los tipos de interés mostró las divisiones internas de la Fed, ya que contó con siete votos a favor y tres en contra.
Dos de los que se opusieron a la rebaja abogaban por una pausa; mientras que el otro voto en contra pretendía que el recorte fuese aún mayor.
El banco central estadounidense emitirá el miércoles un comunicado al término de la reunión, a las 14:00 hora local (18:00 GMT), con la decisión final sobre la evolución de la política monetaria del país.
Los mercados esperan que el organismo dirigido por Jerome Powell siga con los recortes de los tipos de interés y anuncie el tercero en lo que va de año.
Esta potencial reducción del precio del dinero situaría la tasa en el rango de entre el 1.5 y 1.75 por ciento, unas cifras alejadas del rango de entre el 2.25 por ciento y el 2.5 por ciento que dominó la primera parte de 2019.
En el último "libro beige" publicado por la Fed hace dos semanas, la reserva confirmó la actual desaceleración de la economía de Estados Unidos, que ha moderado su ritmo de expansión debido a las "persistentes" tensiones comerciales, especialmente con China, y un menor crecimiento global.
Este análisis será la hoja de ruta utilizada hoy y mañana por los miembros del banco central estadounidense para dictaminar el futuro del precio del dinero en Estados Unidos, un índice seguido a nivel mundial.
Aunque el pasado 11 de octubre Estados Unidos y China llegaron a un acuerdo parcial para rebajar las tensiones en su disputa comercial, que se prolonga ya más de 15 meses, aún se mantienen aranceles multimillonarios a importaciones de ambos países.
Desde su llegada a la Casa Blanca, Trump ha criticado fuertemente todas las decisiones de la Fed, que ha calificado de "patética", y ha cargado contra Powell en repetidas ocasiones.
De hecho, ha responsabilizado al banco central de la "excesiva fortaleza" del dólar frente a otras divisas y de "afectar negativamente" al sector manufacturero del país.