"Nos conviene (el tratado) y es magnífico para que haya más inversión extranjera y estimular la participación de las empresas", declaró el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en el Palacio Nacional.
En la conferencia matutina y acompañado de varios miembros de su gabinete, el líder de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) indicó que este 30 de mayo se pedirá a la Cámara alta "de manera respetuosa" y aceptando "su independencia" ratificar este convenio comercial.
La negociación para modernizar el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) comenzó en agosto de 2017 y fue una auténtica montaña rusa con idas y venidas de la Casa Blanca, con un Donald Trump empeñado en mejorar las condiciones del que, para él, era el peor tratado comercial de la historia de EU.
Finalmente, el 30 de noviembre se logró un acuerdo entre países -con un México todavía bajo el mandato de Enrique Peña Nieto (2012-2018)- y empezó un largo proceso de ratificación empañado por varios asuntos, como la imposición, y posterior suspensión, de aranceles entre las naciones.
Tras superar estos escollos, López Obrador deseó ahora que se convoque un periodo extraordinario en el Senado para que pronto se ratifique este convenio comercial, muy necesario para México, que destina cerca del 85 por ciento de sus exportaciones a sus vecinos del norte.
Para formalizar la solicitud de ratificación acudirán esta tarde al Senado el canciller, Marcelo Ebrard; la secretaria de Economía, Graciela Márquez; el subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte, Jesús Seade, y el consejero jurídico del Ejecutivo Federal, Julio Scherer.
López Obrador se mostró muy confiado en la ratificación del convenio y destacó que éste servirá para crear "empleos bien pagados en el país".
En su turno de palabra, Graciela Márquez resaltó que el T-MEC beneficiará la actividad productiva del país y recordó que los "flujos comerciales" entre México, Canadá y EU equivalen a 1.2 billones de dólares, siendo "una de las áreas comerciales más importantes del planeta".
La secretaria señaló que mantener este tratado permitirá mayor "certidumbre y certeza", elementos básicos para atraer inversión e interés empresarial.
En tanto, Seade -quien fue propuesto por López Obrador y acompañó al equipo de Peña Nieto en los últimos meses de renegociación del TLCAN- recordó que se ha logrado superar varios obstáculos para aprobar el T-MEC.
Desde el acuerdo del 30 de noviembre -cuando concluyeron las negociaciones- hasta la aprobación de una reforma laboral en México el 11 de abril, que era muy necesaria para que EEUU aceptara ratificar el tratado.
Y finalmente, la suspensión de aranceles a mediados de mayo.
Seade expresó la esperanza de que Estados Unidos y Canadá -su primer ministro, Justin Trudeau, presentó este miércoles su solicitud ante el Parlamento- ratifiquen el tratado antes de julio.
Y México, continuó, debería hacerlo en las "próximas semanas".
Preguntado por la prensa, López Obrador rechazó este jueves mezclar este asunto comercial de gigantesca importancia con los exabruptos habituales de Donald Trump y su afán por construir un muro en la frontera entre ambos países para frenar la migración.
"Son dos temas importantes. Primero lo del tratado, que es lo que ahora estamos resolviendo y espero que sea definitivo, porque nos conviene. Y el otro tema es el fenómeno migratorio, y para esto vamos a seguir insistiendo en atender las causas y buscar un acuerdo bilateral de cooperación para el desarrollo", concluyó.