"Esperamos una alta volatilidad también en 2015, por lo que somos positivos con nuestras perspectivas", dijo en Frankfurt al director financiero del grupo, Gregor Pottmeyer.
La compañía cuenta con que aumentará su beneficio neto este año desde los 2,100 millones de euros de 2014 a 2,300 millones de euros (2,400 a 2,600 millones de dólares).
La buena marcha de la bolsa en el inicio de año hizo que la empresa estime un aumento también en el beneficio operativo de 925 millones a 1,125 millones de euros.
Las fluctuaciones en los mercados financieros globales vienen reactivando el negocio desde el verano (boreal) del año pasado, como informó Deutsche Börse ya la noche del miércoles.
Los beneficios netos aumentaron en 2014 por primera vez desde 2011 cerca de un siete por ciento. Los accionistas cobrarán un dividendo de 2.10 euros por acción.
El director ejecutivo del grupo, Reto Francioni, hizo un balance posible ante su alejamiento tras casi diez años en el cargo.
"Deutsche Börse se encuentra en un momento excelente pese a los ataques de los fondos especulativos, la mayor crisis financiera desde 1929, enormes cambios estructurales y una regulación sin precedentes", destacó.
El suizo abandonará la cúpula de la entidad tras la asamblea general del 13 de mayo. Su cargo pasará a ser ocupado el 1 de junio por Carsten Kengeter, ex jefe de banca de inversión del banco suizo UBS.