"Si todo permanece igual que como está actualmente, podría seguirse con esta política de tasas bajas. Sin embargo, ya se sabe que la realidad con frecuencia es mucho más compleja", aseguró Mersch.
El BCE recortó en su última reunión su principal tasa de interés desde el 0.25 por ciento hasta el 0.15 por ciento, anotando un nuevo mínimo histórico. "El banco quiere acercarse lo más rápido posible a su objetivo de tener una tasa de inflación cercana pero por debajo del 2 por ciento", opinó.