“Esta es la oportunidad sin par que está teniendo el Reino Unido. Somos un país que contempla el futuro con confianza (..) Consideramos que este camino conduce a un futuro mejor para nuestros hijos y nietos”, declaró en un discurso ante el 47 foro económico la jefa del gobierno británico.
Ante un auditorio compuesto de líderes empresariales, May aseveró que la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) supondrá para el país recuperar el control de su propio destino y que con “el brexit” “el pueblo eligió un rumbo audaz, eligió crear una Gran Bretaña auténticamente global”.
“Seremos un país seguro que se hace con el control de su propio destino de nuevo. Un país que lo controla es más que menos”, subrayó ante un auditorio que aplaudió, sin euforia, a la líder conservadora británica durante su intervención de media hora de duración.
“El Reino Unido se elevará a un nuevo papel de liderazgo como defensor más fuerte a favor de los negocios, de los mercados libres y del comercio libre”, aseguró May.
Agregó que “no hay porqué rehuir el camino” marcado por los británicos por mayoría, a favor de que su país abandone a “los 28”.
“Quiero que el Reino Unido emerja de este periodo de cambio como una Gran Bretaña global. Un británico global no es menos británico”, subrayó May, quien dirige la transición hacia la salida de su país de la UE.
La primera ministra británica comentó que Londres impulsará a partir de ahora nuevos tratados de libre comercio, entre ellos con algunas de sus ex colonias, Australia, Nueva Zelanda y con India.
“Se trata de abrazar un auténtico comercio libre porque esta es la base para nuestra economía”, explicó.
La jefa del gobierno británico defendió la decisión de salir de la UE tomada en referéndum a mediados del año pasado por los ciudadanos de su país.
“Millones de mis ciudadanos votaron con determinación y tranquilidad salir de la UE y abrazar el mundo. No infravaloremos esta decisión. Significa que Gran Bretaña debe pasar un periodo de transición. La negociación será dura”, dijo respecto a las pláticas con la UE para la salida británica del bloque.
May insistió en que al decidir el brexit, el pueblo británico no quiso expresar su rechazo “a nuestros amigos europeos” y que el “éxito” de la UE “redunda en el interés del Reino Unido”.
“A menudo no se entiende desde fuera. Algunos de nuestros socios europeos consideran que les hemos dado la espalda”, comentó.
Pero “nuestra decisión no es un rechazo a nuestros amigos en Europa, no fue el intento de distanciarnos de ellos, ni de cesar en la cooperación. Tampoco ha sido la tentativa de socavar a la propia Unión Europea”.
“Fue un voto para asumir el control y tomar decisiones por nosotros mismos y convertirnos en más globales, más internacionalistas en el espíritu y en la acción”, concluyó.