En la búsqueda de obtener mayores beneficios y ahorros cuantificables existen diversos factores a considerar, por lo que se debe realizar la pregunta ¿arrendar unidades o comprarlas?
Antes de elegir el camino por recorrer, One Fleet Services, experto en arrendamiento y gestión de flotillas, te muestra las diferencias clave entre arrendar y comprar.
Arrendamiento:
Costo inicial bajo
Un contrato de arrendamiento puede aliviar considerablemente la carga financiera que implicaría comprar nuevos vehículos. El arrendamiento implica un pago inicial que ronda entre el 5-10%. Debido a esto, algunas compañías pueden ofrecer un automóvil más lujoso a sus ejecutivos, lo que hará que también se sientan más motivados y comprometidos con las mismas. Cuidar el flujo de efectivo y evitar descapitalizarse comprando un activo que se deprecia, es la clave.
Renovación constante
Al finalizar un contrato de arrendamiento, se pueden obtener vehículos totalmente nuevos. No solo por la satisfacción de estrenar, sino también para evitar gastos innecesarios e importantes por mantenimientos correctivos de las unidades más obsoletas. Al arrendar, beneficias tu flota con avances tecnológicos.
Decir adiós a las preocupaciones por mantenimiento
Nada como permitir que una arrendadora se convierta en tu aliado y sea ella quien administre los servicios, pagos, seguros, etc. de todas tus unidades, sin preocupación alguna; dejando a las empresas crecer enfocándose en su giro de negocio, permitiéndoles no descapitalizarse. Existen arrendadoras que brindan a sus clientes beneficios como portales Web y/o Apps, que facilitan el monitoreo y administración de las flotillas, One Fleet Services, por ejemplo.
Deducciones fiscales
Un contrato de arrendamiento puede brindar más deducciones de impuestos que una compra de contado, incluso, deducir el 100% de los servicios de administración y valor agregado, como: seguro vehicular, rastreo satelital, asesoría legal, administración del mantenimiento, telemetría, administración de flota, etc.
¿Comprar?
Obtener una unidad bajo esquema de compra, solo representaría hacer un desembolso, en un solo momento, mucho más alto, que puede afectar el flujo de caja e, incluso, distraer recursos para la inversión o el crecimiento. No aprovecha deducciones fiscales y suma gastos adicionales constantes, dada la falta de una administración puntual.