Fitch Ratins expresó en un comunicado que el T-MEC tiene disposiciones sobre productos lácteos, avícolas, huevo, textiles, contenido digital, propiedad intelectual y, sobre todo, requisitos para la producción de automóviles.
Por lo tanto, la industria que más afectada se vería a nivel mundial sería la automotriz, que exporta a Estados Unidos productos producidos en México con un valor de miles de millones de dólares.
Se espera que si el acuerdo comercial se ratifica "reduzca las barreras, los precios de las materias primas impulsados por el comercio y la volatilidad de los tipos de cambio, así como la incertidumbre generada por tensiones comerciales respecto a la inversión", valoró la firma.
Pese al acuerdo alcanzado entre los tres países el año pasado, el T-MEC debe ser ratificado todavía por los legislativos de los tres países firmantes.
México fue el segundo mayor exportador a Estados Unidos en 2018, y las ventas crecieron un 10 por ciento frente a 2017, de acuerdo con la Oficina del Representante de Comercio de los Estados Unidos.
"Los vehículos representaron la categoría principal de importaciones, segmento valorado en 93,000 millones o 27 por ciento del total", indicó Fitch.
El país latinoamericano también es el que más productos agrícolas proporciona a Estados Unidos, junto con vino, cerveza y aperitivos.
Además, de implementarse las medidas arancelarias también se afectará en el flujo de efectivo a las empresas.
"Las implicaciones crediticias en el corto plazo de los posibles aranceles son limitadas. Pero los efectos del flujo de efectivo dependerán de la capacidad de trasladar el costo a los consumidores y de la flexibilidad de los procesos de manufactura", apuntó.
Trump anunció el jueves pasado por sorpresa su decisión de aplicar aranceles a todos los productos mexicanos del 5 por ciento -y aumentar los gravámenes gradualmente hasta el 25 por ciento en octubre- si México no frena la creciente migración hacia su vecino del norte.
El presidente estadounidense dio hasta el 10 de junio para negociar antes de la entrada en vigor de los primeros aranceles que afectarían a la totalidad de las importaciones procedentes de México.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseveró este mismo miércoles que "lo mejor es el libre comercio" y reiteró que buscará un acuerdo sin confrontación con Estados Unidos en la reunión de alto nivel en Washington por el anuncio de imposición de aranceles.
Recordó que ante situaciones de conflicto hay tres posibilidades; abrir una guerra, evitar el conflicto cerrando el diálogo o, su opción, que consiste en buscar la comunicación y evitar el aislamiento.
"Queremos mantener la unidad con el pueblo y el gobierno de Estados Unidos. Y mantener muy buenas relaciones con el presidente Donald Trump", agregó.
Desde mediados de octubre, el número de migrantes que cruza México para llegar a Estados Unidos ha crecido exponencialmente.
Principalmente, por el fenómeno de las caravanas migrantes -con miles de personas en su mayoría centroamericanas- que viajan en grupo por motivos de seguridad y para hacer más presión frente a las autoridades migratorias.